Las promesas a Salamanca, herencia de gobierno en gobierno, que siempre decepcionan
Proyectos como la electrificación, la mejora de servicios ferroviarios, la conexión de autovías o el área de servicio de Fuentes de Oñoro que ningún partido logra ejecutar
Promesas que no valen nada. Como si fuera una canción, la campaña electoral regresa a Salamanca con propuestas que suenan conocidas por el largo tiempo que hace que están comprometidas. La electrificación ferroviaria, la mejora de los trenes, la conexión de autovías o el área de servicio de Fuentes de Oñoro terminan la legislatura sin hacerse realidad, ni parcial ni totalmente.
Son muchos los proyectos que se pudren durante años sin que lleguen a ejecutarse, aunque algunos van saliendo de la lista poco a poco. Pero los citados tienen en común una cosa: pasan de mano en mano, de Gobierno en Gobierno, sin avances. Por este motivo, todos han entrado en el catálogo de reproches cruzados entre los dos partidos que han tenido peso de Gobierno en los últimos años. Sin embargo, son críticas de ida y vuelta.
En algún momento, PP y PSOE y sus parlamentarios por la provincia han tenido ocasión o responsabilidad de sacar adelante algunos de estos proyectos sin que, al término de los respectivos mandatos, hayan avanzado. Lo que fueron banderas que defender se convirtieron después en críticas al incumplimiento y volverán, previsiblemente, a serlo con las tornas cambiadas. Vuelta a empezar porque, además, puede que lo que se ha pedido en campaña haya que reclamarlo después a un gobierno de nuestro mismo color.
Conexión de autovías
Sin avances con dos gobiernos
Es una de las grandes promesas incumplidas que han pasado de mano en mano de los dos últimos gobiernos, de diferente color, sin experimentar ni un solo avance. La conexión de autovías debe paliar el problema de bajar todo el tráfico de dos autovías y varias carreteras locales a la rotonda de Buenos Aires.
La solución llegó a manos del último gobierno sin avances en los trámites, pero todos los que se han hecho después han sido infructuosos. Se planteó construir un nuevo viaducto que atravesar el río y conectara A-62 y A-66, pero la aparición de un yacimiento con grabados paleolíticos mandó a la basura el proyecto.
Ahora, Fomento trabaja en una solución más 'local', sin viaducto, que cuenta ya con proyecto y está en trámite, pero que no se ha podido ejecutar.
Servicios ferroviarios
Sin mejora por el Covid
Las promesas ferroviarias están a la cabeza si de incumplimientos hay que hablar. Hace años que Salamanca persigue mejores servicios y conexiones por tren sin que se hayan hecho posibles. Muy al contrario, la legislatura del Covid termina sin tren nocturno a Lisboa, con un Alvia menos a Madrid y con problemas con los abonos. Algo parecido a lo que heredó el actual Gobierno, que se vio con la promesa de unos abonos asequibles para el tren rápido que nunca fueron reales y con problemas por la baja ocupación, que rondaba el 50%, por los altos precios. El tren-hotel tampoco gozaba hace cuatro años de gran aceptación y su futuro ya estaba en el aire.
La cuestión ferroviaria va a seguir siendo un quebradero de cabeza. Ayuntamiento de Salamanca reclama ahora también la conexión con Portugal a través de la provincia que está en disputa con Extremadura. Y la Junta se ha subido a la iniciativa para recuperar el tren ruta de la Plata, que se quedó incialmente fuera de los planes de Europa con el PSOE en el Gobierno. Con el PP en la responsabilidad, tampoco se dieron pasos para recobrar esta conexión.
Electrificación ferroviaria
Sin terminar ni apeadero
Un capítulo especial merece la electrificación ferroviaria, un proyecto millonario con numerosas implicaciones que ha terminado mandato sin verse finalizado y con tareas pendientes. La obra se anunció hace años y tenía que haber estado terminada en 2023, cosa que no será posible. De hecho, esta fecha ya se ha dilatado con respecto a la inicial, que apuntaban a 2019 cuando se anunció el proyecto en 2015 por 66 millones de euros.
Desde entonces, una catarata de problemas con los contratos y de trámites inacabados han retrasado su ejecución. El actual gobierno empezó su mandato con críticas porque, decían, heredaban una tramitación incompleta. Al término de la legislatura, la obra sigue incabada y con algunos problemas como el apeadero de La Alamedilla, que lleva tres años derruido.
La modernización de la línea tiene implicaciones para el puerto seco de Salamanca y su desarrollo logístico, al que el Gobierno actual no ha aportado nada... como tampoco hizo el anterior. El actual mandato termina sin fecha para las obras y un apeadero menos, aunque sí se ha logrado eliminar el paso a nivel de Gomecello.
Memoria Histórica
Plazos que expiran
El proyecto del Centro de la Memoria Histórica tiene un amplio historial de tropiezos vinculados a los cambios de Gobierno, sin que uno ni otro signo hayan logrado terminarlo: un resultado idéntico a pesar del diferente interés. La tarea pendiente es su tercera sede, que está proyectada desde 2014, pero hasta ahora sus avances han sido escasos o nulos.
En 2017 se dieron algunos pasos por parte del anterior Gobierno, pero no fructificaron: se dejó pasar el tiempo para ejecutar la obra en una parcela cedida por el municipio a condición de respetar unos plazos que no se cumplieron.
En 2009, el pleno del Ayuntamiento de Salamanca aprobó la cesión por diez años de la parcela destinada a la tercera sede al Ministerio de Cultura, con la única condición de que se levantara allí el edificio. Sin embargo, nada se hizo y en 2019 hubo que renovar el convenio de cesión de la parcela porque había expirado sin que se hubiera hecho nada por parte del ejecutivo. Se hizo por un plazo de otros cinco años que expiran durante 2024, con lo que antes de esa fecha hay que poner en marcha la construcción si no se quiere repetir el problema.
Área de Fuentes de Oñoro
Urgente y atascada
Un proyecto que parece olvidado por casi todos es el del área de servicio de Fuentes de Oñoro. Tras lograr poner en funcionamiento el último tramo de la autovía a Portugal, el gobierno saliente logró dar carpetazo a una de esas promesas que rodaban de mandato en mandato. Pero queda pendiente ejectuar una gran infraestructura que compense al municipio.
Está presupuestada en 9,5 millones de euros y fue declarada urgente, pero desde julio de 2019 está atascada en trámites sin que haya salido adelante. La licitación para construirla quedó inicialmente desierta y, después, se ha adjudicado sin que haya habido formalización de contrato.
Audiencia Provincial
Problemas con las obras
El último proyecto que el próximo Gobierno heredará sin ejecutar en Salamanca es el de la reforma de la Audiencia Provincial. Cuando el PSOE llegó hace cuatro años a la Moncloa, puso de manifiesto que no se había ejecutado la tramitación necesaria. Así era, pero cuatro años no han bastado para desatascar este asunto.
El edificio de Gran Vía necesita una reforma para adaptarse a nuevas necesidades y cumplir con algunas exigencias de accesibilidad, pero la contratación y ejecución de los trabajos ha estado plagada de problemas. Siempre ha habido presupuesto, pero los proyectos tardaron y, ahora que existen, se ha cruzado una dificultad: hay que trasladarse provisionalmente a un edificio que, a su vez, necesita obras de mejora.
En ese trámite se han ido meses porque la obra quedó desierta por el aumento de costes. Y ha llegado el final de mandato como terminó el anterior, sin poder cumplir esta promesa.