La Salamanca de los pisos vacíos: los pueblos y barrios con más viviendas sin usar
Las estadísticas afloran 8.000 pisos vacíos más en una década, pero se concentran fuera de la capital: una de cada tres viviendas de la provincia se usan menos de tres meses al año
La Salamanca interior es también la Salamanca de los pisos vacíos. Así se desprende de los datos del último censo de población y viviendas del INE que, cada diez años, repasa el parque de edificios residenciales y su uso y que este año llega con novedades sobre el número de pisos en los que no vive nadie o no se usan, que en el global de la provincia son uno de cada tres, por los uno de cada siete del total de España.
Según los datos del INE, en Salamanca han aflorado 8.000 pisos vacíos más en una década, un 25% más, pero el aumento se concentra en los municipios menos poblados frente a la capital, donde el número de viviendas sin uso se reduce a la mitad. La viviendas vacías se elevan a más de 41.000. Se les suma el número de viviendas de uso esporádico, en las que se pasa de uno a tres meses al año, ronda las 50.000 en toda la provincia, lo que eleva la cifra por encima de las 90.000, un tercio de las 246.000 del parque provincial.
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Una de cada siete viviendas en España está vacía
Para conseguir los datos, el INE ha recurrido a un nuevo sistema y aprovecha la información que proporciona el consumo eléctrico de cada hogar. Con los datos de los contratos de suministro se ha podido establecer una visión más precisa sobre el uso de las unidades residenciales.
Hasta 2011 las viviendas se clasificaban en principales, secundarias y vacías, según la información que recogía el agente censal que visitaba el edificio. La clasificación utilizada en el censo de 2021 es mucho más precisa, ya que está basada en información y datos más objetivos, como los del consumo eléctrico que la vivienda ha realizado a lo largo de todo el año precedente.
Con esos datos, se ha elaborado la distribución de las viviendas según consumo eléctrico considerando cuatro grupos: viviendas vacías, viviendas con muy bajo consumo, viviendas de uso esporádico y resto de viviendas. Se considera como vivienda vacía a aquella que no dispone de contrato de suministro eléctrico o cuyo consumo total registrado en el año precedente ha sido menor al que una vivienda media de ese mismo municipio tendría si se ocupara durante 15 días en todo el año.
Además, se ha establecido otro umbral –fijo para todos los municipios- de 250 kWh que, de media y de forma aproximada, correspondería al consumo de una vivienda que estuviera ocupada durante un mes en el año. A las viviendas con consumo por debajo de este umbral se las ha catalogado como de muy bajo consumo.
Por su parte, las viviendas con un consumo entre 251 kWh y 750 kWh (correspondería, siempre de media, a un uso de la vivienda durante un periodo de uno a tres meses en todo el año) se han denominado como de uso esporádico.
Una de cada tres no se usan
En el caso de Salamanca, en el global de la provincia se contabilizan 246.123 viviendas de las cuales 41.709 se consideran vacías. Otras 33.339 se consideran de uso esporádico, es decir, que se utilizan menos de tres meses al año. Y otras 17.493 son de muy bajo consumo, es decir, que se usan menos de un mes al año. En total, más de 90.000 viviendas de las 246.000 consideradas, una de cada tres, están vacías o se utilizan menos de tres meses al año.
Sorprende el dato de los municipios con más vivienda vacías. A la cabeza está la capital con 6.510, la mitad que hace diez años, y sobre una cifra de 92.000: una de cada 15, un 6%. Es llamativo, en comparación, el número de viviendas vacías de Béjar (1.929) y Ciudad Rodrigo (1.784) en comparación con el parque total de pisos: la ciudad textil suma 9.826 y miróbriga, 9.525. Ambas tienen, por tanto, cerca de un 20% de sus pisos vacíos.
En este sentido, el municipio más afectado por los pisos vacíos es Fuentes de Oñoro, con un 23% de sus viviendas sin uso y otro 40% en uso esporádico o muy reducido, de 1 a tres meses al año.
Por barrios
En la capital el efecto es menor. El número de viviendas vacías se ha reducido en la última década, aunque además de las 6.510 vacías tiene otras más de 11.000 de uso esporádico y otras 3.500 de uso reducido en función de su consumo de electricidad; en total, son 21.000 viviendas que se usan menos de tres meses al año o están vacías de las 92.000 disponibles, un 25%.
Por barrios, el nivel de viviendas vacías es similar para cada uno de los seis distritos que ha analizado el INE. El instituto ha tomado como referencia el dato del consumo eléctrico específico del municipio y asume que donde el consumo anual es inferior, estamos ante viviendas que se usan poco.
Según los datos de consumo, los barrios del trastormes, Garrido y el Rollo son lo barrios con un mayor número de viviendas con un consumo energético por debajo de la media que indicaría que están vacías buena parte del año o que se usan esporádicamente.