Más trabas para los inquilinos tradicionales: el polémico alquiler de temporada avanza en Salamanca

La situación del mercado del alquiler en Salamanca está viviendo unos años bastante convulsos, que están cambiando el panorama, el tipo de inquilino de determinados pisos e incrementando los problemas para familias y arrendatarios tradicionales a la hora de encontrar una vivienda para alquilar, tal y como publicó hace unos días salamamancahoy.es

El alquiler de viviendas roza máximos históricos de precios, los pisos turísticos prolifera, los pisos compartidos siguen copados por los estudiantes y el mercado se aprieta marcado a demás por la escasa rentabilidad que logran los propietarios con los arrendamientos, de acuerdo con las últimas estadísticas.

Pues bien en medio de ese panorama han surgido una nueva modalidad de alquiler que avanza a pasos agigantados en Salamanca capital, aunque aún no tiene excesivo peso en el mercado del alquiler. Se trata del denominado alquiler de temporada, que desde hace más o menos un año avanza en toda España, mientras el alquiler permanente, el tradicional cada vez pierde más peso dentro del mercado.

Los alquileres de temporada son aquellos que no se destinan a satisfacer una necesidad permanente de vivienda, la mayoritaria en Salamanca, con los estudiantes y los trabajadores llegados de otras provincias como principales clientes, sino que sirven al alojamiento durante un periodo de tiempo muy concreto. Se rigen por la voluntad de las partes, la Ley de Arrendamientos Urbanos y el Código Civil. Quedan fuera del ámbito de aplicación de la Ley de Vivienda, por lo que no se ven afectados, entre otros aspectos, por las limitaciones en las actualizaciones de la renta o las prórrogas extraordinarias del contrato.

La entrada en vigor de la nueva Ley de Vivienda generó una serie de críticas desde determinados sectores, sobre todo de los propietarios de viviendas en alquiler, que advirtieron de que algunas medidas incluidas en esa normativa «iban a agravar» la falta de vivienda en alquiler en España y crea «inseguridad jurídica» sobre la propiedad inmobiliaria.

Parece que el mercado inmobiliario, en lo que respecta al alquiler, ha refrendado estas previsiones, y aunque de acuerdo con el citado informe del portal inmobiliario 'idealista', en el segundo trimestre de 2024 el peso de este tipo de alquileres aún solo representa el 2% del mercado en Salamanca, frente al 13% de media que ha alcanzado ya en el conjunto de España, lo cierto es que su crecimiento en la capital salmantina es galopante, con un incremento interanual de la oferta del 143%, casi tres meses que el incremento medio a nivel nacional (55%), mientras que la oferta de alquileres permanentes se redujo un 17% en el mismo periodo, el mismo porcentaje que en España. Para comprobar que la evolución es bastante rápida, baste decir que hace tres meses el alquiler de temporada representaba el 1% del mercado en Salamanca, por lo que en tres meses ya ha doblado su representatividad, que sigue al alza.

Por lo que respecta a Castilla y León, la evolución es muy dispar. En Valladolid destaca que los alquileres permanentes se han reducido un 35%, y los de temporada han subido un 15%. Donde más han subido los alquileres de temporada, un 160%, es en Ávila y en Soria la subida a llegado hasta el 100%. Donde el panorama del alquiler parece más oscuro en León y Palencia, donde se han registrado importantes caídas tanto en el número de viviendas en alquiler permanente como de temporada.

En Barcelona el 42% de las viviendas que se ofrecen lo hacen para alquiler de temporada, una cifra que baja hasta el 34% en el caso de San Sebastián. A continuación se encuentran las ciudades de Badajoz (21% del total) y Girona (20%), seguidas de cerca por Cádiz (19%), Madrid (16%) y Valencia (15%). Con un peso superior al 10% de la oferta están también Santander (14%), Palma (13%), Tarragona (12%), Málaga (11%) y Bilbao (10%).

Por el contrario, en las zonas menos tensionadas esta modalidad temporal es prácticamente inexistente, ya que en 2 capitales el peso de la misma sobre el mercado ronda el 0%. Se trata de las ciudades de Ourense y Melilla. Con el 1% se encuentran las capitales de Ciudad Real, Lugo, Zamora, Cáceres y Albacete.

Entre los grandes mercados el mayor incremento de la oferta de temporada se ha dado en Málaga, que cuenta con un 99% más que hace un año, seguido por Bilbao (73%), Palma (72%), Valencia (70%), Sevilla (63%), Madrid (53%) y Barcelona (48%). En Alicante, por su parte, la oferta de alquileres temporales ha crecido un 22% en los últimos 12 meses, mientras que se ha incrementado un 21% en San Sebastián.

Los mayores y más espectaculares incrementos de oferta de este tipo se han dado en pequeños mercados donde este fenómeno era hasta ahora prácticamente inexistente y en los que la aparición de un puñado de anuncios ha provocado subidas muy pronunciadas. Son los casos de Badajoz (1956%), Pontevedra (800%), Murcia (417%) o Huesca (400%). Por el contrario, en cinco capitales los alquileres temporales se han reducido durante este año: Zamora (-67%), Melilla (-50%), Lugo (-50%), León (-20%) y Palencia (-20%).

En paralelo a estos crecimientos, los alquileres de larga estancia siguen cayendo en este último año en los principales mercados. El mayor descenso se da en Barcelona (-45%), seguido por San Sebastián (-32%), Sevilla (-27%), Madrid (-22%), Bilbao (-22%), Alicante (-8%) y Valencia (-6%). Aún así, en la ciudad de Málaga la oferta ha logrado crecer un 4%. Entre el resto de ciudades la mayor caída se ha dado en Palencia (-47%), Oviedo (-44%), Valladolid (-35%) y Teruel (-32%), mientras que las mayores subidas se han producido en Cáceres (38%), Melilla (28%), Cuenca (26%), Almería (20%) y Ávila (6%).

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