Último paso para conectar desde Salamanca los trenes hacia Portugal

El derribo de uno de los puentes sobre la vía del tren en Salamanca mantendrá cerrada al tráfico la calle Cordel de Merinas durante los próximos cuatro meses. Las obras, que ejecuta Adif, arrancan el día 11 de noviembre y se prolongarán durante cuatro meses como parte de los trabajos de adaptación del paso de la vía férrea por la ciudad.

La obra mantendrá cerrada al tráfico esta calle y obliga a desviar el bus urbano, pero también supone la recta final de la electrificación de la línea hasta Portugal que abre la opción futura de contar con una nueva conexión para mercancías y pasajeros.

Con esta obra, Adif va a iniciar al fin la última fase de la electrificación de la línea férrea entre Salamanca y Fuentes de Oñoro, una inversión que dará paso al uso de esta línea hasta la frontera y su continuidad por las vías portuguesas hasta el puerto de Aveiro. La finalización de esta obra será una buena noticia para las conexiones ferroviarias de la provincia, aunque llega con bastante retraso.

La última fase consiste en la adaptación de alturas de varias infraestructuras a su paso por la ciudad. Las catenarias para electrificar la vía y permitir que sea de altas prestaciones obligan a revisar los gálibos, las alturas libres de paso. Eso ha retrasado durante años la obra, que ha ido avanzando en paralelo en otros tramos de la provincia mientras ayuntamiento y Adif modificaban los proyectos.

Por fin, hace unas semanas, se ha adjudicado el nuevo contrato de adaptación de gálibos, que es la obra que se tiene que ejecutar ahora, que vio incrementado su presupuesto hasta los 7,3 millones de euros desde los 5 originalmente previstos. Entre las actuaciones previstas está la reconstrucción del apeadero de La Alamedilla, que obliga a inhabilitar esta parada durante este mes de noviembre, hasta el día 22.

Además de volver a levantar el apeadero, hay que adaptar al menos dos de los puentes sobre las vías. El primero será este de la calle Cordel de Merinas, entre la calle Buenaventura y la calle Almeida.

La calle permanecerá cerrada al tráfico desde este lunes, 11 de noviembre, debido a la realización de obras en la zona por parte de Adif. Se estima un periodo de duración de los trabajos de cuatro meses. El tráfico será desviado por la calle Vilar Formoso y la carretera de Aldeatejada.

Debido al corte, se verá afectada la línea 10 del autobús urbano, que modificará su recorrido por la calle Buenaventura, carretera de Vistahermosa, calle Vilar Formoso y carretera de Aldeatejada, para continuar por la calle Buenaventura. Se realizarán paradas alternativas en la carretera de Vistahermosa y calle Vilar Formoso, intersección con la calle Ramón de Mesonero Romanos.

Cuando finalice la adaptación de gálibos y la electrificación de la línea compelta, sólo faltará unir el lado español y el portugués 'enchufando' ambas instalaciones eléctricas.

La Salamanca-Fuentes de Oñoro, conocida como línea 120, tiene su continuidad en el lado portugués con la línea de la Beira Alta. Esta última también está siendo electrificada y, de hecho, está previsto que se reabra al tráfico de trenes por tramos a partir de noviembre. En el caso del lado español, ya está conectado el control de la línea hasta Tejares.

Estando ambas líneas electrificadas y en ancho ibérico, el objetivo es conectarlas para dar continuidad a la circulación, el motivo por el que ambas actuaciones recibieron fondos europeos. La frontera ferroviaria está establecida en el Km 124,235 de la Línea 120 Medina del campo-Fuentes de Oñoro. Esta conexión fronteriza se realiza en ancho ibérico (1.668mm) con una única vía electrificada a 25KV perteneciente a Portugal; la vía española está electrificada con las mismas características.

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