Los pueblos de Salamanca que todavía tienen bar y las ayudas para volver a abrirlos

El asunto se ha convertido en materia de políticas de la administración y tanto la Junta de Castilla y León como, ahora, la Diputación de Salamanca han anunciado líneas de ayuda para conseguir que aquellas localidades que no tengan puedan apoyar la apertura de un bar. Una propuesta que puede elevar el número de estos establecimientos, que ya son mucho más numerosos, por ejemplo, que las sucursales bancarias y cajeros que sólo 35 localidades de la provincia tienen.

Ahora, las administraciones tienen dos ayudas en marcha. La Junta, una de 3.000 euros anuales para abrir o mantener bares en localidades de menos de 100 habitantes; las ayudas son para mantener «centros de ocio y convivencia social» y los bares son una opción. La nueva línea destinará una ayuda para los gastos corrientes de estos centros, como agua, luz, gas, calefacción, aire acondicionado o televisión.

Por su parte, la Diputación salmantina ofrece hasta 30.000 euros al año para la misma actividad. Entre los requisitos para solicitar la ayuda, el fundamental es que el pueblo no cuente con ningún establecimiento de hostelería. A partir de ahí, se establece un compromiso de apertura durante todo el año de al menos dos días a la semana y un periodo de actividad de al menos cinco años. Tendrán que estar en un local municipal y gestionarse directa o indirectamente.

El interés entre los municipios existe y son numerosos los casos de ayuntamientos que publican ofertas para hacerse cargo de un local de hostelería, en ocasiones vinculado a otros servicios o a la piscina municipal. Y lo hacen por precios bajos ante la falta de aspirantes para abrir negocios en lugares poco poblados, el mismo problema que ha vaciado de otros servicios la provincia.

Según un estudio publicado a finales de 2022, más de 1.435 pueblos en España no tiene ningún bar. La Asociación Estatal de Directoras y Gerentes en Servicios Sociales revela que el 17,7% de los municipios del país no tiene ningún establecimiento de hostelería, siendo la inmensa mayoría pequeñas localidades en los que el tamaño medio ni siquiera llega a los 100 habitantes (el 99,5%). Por comunidades, Castilla y León concentra casi la mitad de la población que vive en municipios sin bares. Y Salamanca es una de las más afectadas.

Según el citado estudio, más de 10.000 habitantes y 115 localidades no tienen bar en la provincia de Salamanca; es una de las más destacadas del país junto a Burgos y Zamora. Sin embargo, el estudio tiene un margen de error. La lista que maneja son aquellos donde no se ha encontrado ningún establecimiento hostelero de proximidad pero se puede dar el caso de que en esta lista exista algún bar en la localidad y no esté referenciado en google o que tengan otro tipo de actividad.

Otra fuente de datos como el registro de actividades de turismo de la Junta de Castilla y León ofrece otras cifras. Este es el que toma como referencia la Diputación de Salamanca para su programa de incentivos, que prevé 30.000 euros por municipio y unos 80 potenciales destinatarios.

Según el registro autonómico, un centenar de municipios tiene al menos un establecimiento de hostelería operativo y con licencia en la provincia de Salamanca. En el mapa superior se puede consultar su localización y número, aunque también puede ser inexacto, por ejemplo, si un local tiene la correspondiente licencia en trámite.

El listado recoge los 1.727 establecimientos con licencia de bar que se reparten por la provincia, en un centenar de municipios diferentes. Los que más tienen son la capital, con 754, Ciudad Rodrigo con 103 y Béjar con 51.

Como es frecuente con otros mapas de servicios, como el de localidades con servicio presencial de banca (sucursal o cajero) hay muchas zonas 'en blanco' con municipios que carecen de al menos un bar. La mayoría se concentran en los núcleos más poblados, aunque no faltan casos en los que pequeños municipios tienen una importante oferta.

Es el caso de Navasfrías, de menos de 500 habitantes, que tiene según el registro de la Junta ocho bares abiertos; los doce de Linares de Riofrío, con un millar de habitantes, pero de referencia en la sierra; o Vitigudino, que tiene 27 establecimientos hosteleros para poco más de 2.300 habitantes.