España roza ya los 20.000 vecinos centenarios

Veinte mil centenarios y subiendo. El ritmo de crecimiento de quienes logran saltar la frontera de los 99 años es altísimo. El informe indica que el volumen de este colectivo aumentó en el último año un 9% con respecto a 2021, lo que significa que 1.619 ciudadanos se sumaron en solo doce meses al excepcional grupo de edad.

Es el síntoma más llamativo del proceso de envejecimiento general y progresivo que está viviendo la población española, que hace que 2,8 millones de nuestros vecinos, el 6% de todo el censo, tengan más de 80 años y que la edad media de los empadronados supere los 44.

Los expertos del Departamento de Población del CSIC confirman que se trata de un fenómeno cada vez más acelerado, que en poco más tres lustros va a sumar 4,7 millones de españoles a los mayores de 65. España tenía a 1 de enero de 2022 algo más de 9,5 millones de personas mayores, el 20% de toda la población. La proyección que hacen los investigadores para 2040 es que en nuestro país vivan ya 14,2 millones de mayores. Tres de cada diez españoles. El 27,4% de los 52 millones de empadronados que se prevén para entonces.

Pese a todo, España no está en el grupo de cabeza del envejecimiento poblacional europeo, de los mayores del planeta. Su actual 20% de mayores es un punto más bajo que la media comunitaria, 21%, y está lejos de los países más envejecidos, que lideran Italia (23,8%), Portugal (23,7%), Finlandia (23%) y Grecia (22,7%).

El perfil del mayor español, además de especificar que tiene unos ingresos mensuales de 1.375 euros y que suma más de la mitad de los ingresos hospitalarios, tiene rostro de mujer. Hay un 30% más de españolas mayores de 65 años que de varones de su edad. La proporción la explica la enorme brecha de género de los datos de esperanza de vida. Aunque los españoles viven de media 83 años, ellas lo hacen casi seis años más que ellos. La media masculina es de 80,3 y la femenina, 85,8. «La esperanza de vida se ha incrementado de forma espectacular durante todo el siglo XX, de forma notable desde los años ochenta, y la tendencia general es la continuación de ese proceso», aclara uno de los coautores del trabajo, Diego Ramiro Fariñas.

No obstante, la clara supremacía femenina tiene un matiz. Los españoles viven su tiempo de jubilación con algo más de salud que ellas. Los varones tienen una calidad de vida buena durante el 55,7% de su vida de pensionista (10,7 años) mientras a las mujeres esa salud razonable les dura el 43,8% de ese tiempo (10,3 años).

Otro de los rasgos diferenciales del perfil de los mayores españoles es la creciente soledad, que se extiende en el colectivo prácticamente a la misma velocidad que el aumento de los años de vida y cuyo combate deberá ser pronto una prioridad de los gobiernos. Los hogares unifamiliares de jubilados son cada vez más numerosos. Hay 1,7 millones de mayores de 70 años que viven solos en España y, a partir de los 77 años, la gran mayoría son viudas. Estos hogares son, con diferencia, «los que registran niveles más bajos de felicidad» entre todos los segmentos de edad.