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Ya han pasado muchas jornadas tanto en la Liga Femenina y en la Euroliga y el CB Avenida sigue sin arrancar. Un proyecto nuevo que no carbura y que cada partido que pasa levanta más suspicacias por el nivel de jugadoras y técnicos para comandar una nave perfumera que, por resultados y sobre todo sensaciones, está muy lejos de lo que se esperaba.
Este sábado llega una nueva prueba para las de Montañana: Magariños para medirse al Estudiantes a partir de las 19:30 horas (en directo por el por twitch de la FEB). Lo hace tras una nueva decepción europea -la derrota ante el Landes por 59-58, al que ganó por casi de 30 puntos en Würzburg- y días antes de jugarse en la última jornada de la primera fase regular el pase a la siguiente fase en Salamanca ante el Mislock en un grupo que no debía presentar excesivos problemas-.
Pero la realidad es la que es y con dos jugadoras lesionadas (Masa Jankovic y Delaere), el CB Avenida afronta un nuevo compromiso liguero: tercero con 5-2 de balance frente al sexto con 4-3, un Estudiantes liderado por la exazulona Ángela Salvadores, equipo madrileño que ya ganó por ejemplo en su pista a otro equipo de Euroliga como el Casademont Zaragoza y que se las hizo pasar canutas hace dos fines de semana al vigente campeón, el Valencia Basket. Eso sí, llegan de perder en Vitoria ante Kutxabank Araski en la prórroga (85-81). Salvadores promedia 16,9 puntos por partido, bien secundada por Liliana Banaszak (10,9) y Frieda Bühner (9).
En Avenida el foco estará de nuevo puesto en jugadoras de la que se esperaba mucho y siguen sin justificar su fichaje como Kiki Harrigan o una Guirantes que brilla con su selección y que con Avenida tiene unos porcentajes de acierto bajísimos, mientras que otras en teoría secundarias tampoco dan un paso al frente -a excepción de una Iyana que es que con diferencia el mejor fichaje del verano y que apunta a marcar época no solo en Salamanca-.
Montañana, en declaraciones facilitadas por el club, apunta sobre el choque que «vienen en buen momento, es un equipo bien construido con gente joven, activa y generosa en esfuerzos que juegan en equipo, además de tener como referente a Salvadores. Magariños siempre es complicada y más ahora». En el proceso de crecer, Anna reconoce que hay que ofrecer más, «dar más pasos adelante, tener una intensidad alta y no tener bajones o desconexiones que son importantes. En Francia hemos remontado tres veces, pero hay que saber mantenerse». Todo ello sin tener un ojo en el miércoles porque, «cada partido es súper importante para nosotras, necesitamos construir confianza, empezar a jugar de forma más colectiva y que se vea lo que trabajamos, que no se está viendo y con la defensa más consistente posible. Sólo pensamos en hoy y mañana», sentencia Montañana.
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