Los bloques en dos barrios populares de Salamanca que al fin tendrán ascensor

La instalación de ascensores en viviendas que llevan 60 años sin ellos tiene esta semana un segundo capítulo con la autorización de licencias para rehabilitar cuatro inmuebles entre Garrido y la Chinchibarra, unos cuarenta pisos, que recibirán mejoras y los deseados elevadores. El asunto va a la comisión de Fomento el próximo día 15 después de que esta semana se haya aprobado una primera tanda de actuaciones idénticas en la zona del parque de Garrido.

La comisión informativa de Fomento dará de paso el próximo martes la solicitud de licencias de rehabilitación para un portal de la calle Nenúfar y otro del paseo de los Robles, junto a la plaza de Garrido; y otros dos en las calles Crisantemos y Hortensias, en el núcleo de la Chinchibarra. Los primeros son vecinos de los que se aprobaron esta semana en tres portales de Nenúfar y Robles, número 5, mientras que los de Chinchibarra están junto a los primeros bloques del barrio que se rehabilitaron con un plan en el que participaron los vecinos.

A esa zona pertenecen los edificios del núcleo del exitoso ARRU de la Chinchibarra, con el que decenas de vecinos lograron tener ascensor y la mejora de la fachada y condiciones de sus casas en uno de los puntos más degradados de la ciudad.

Con este modelo, se va a hacer lo propio en los bloques más degradados de la ciudad, edificaciones de los años 60 del siglo pasado, en los que se asentó población procedente de los pueblos. Se construyeron con lo mínimo, sin ascensor y muchos sin calefacción, y así han estado las seis décadas siguientes hasta que la situación ha sido insostenible.

Esta actuación se integra en la segunda fase de aquel plan de rehabilitación, con ayudas por un importe total de 1.173.241,38 euros, y de las que se beneficiarán 81 viviendas entre el paseo de los Olivos y las calles Chinchibarra, Olmos y Crisantemos. Esta actuación se suma a la ya licitada en el entorno de las calles Gladiolos, donde existen unos balcones situados a muy baja altura que hacen que el espacio de acera situado debajo de ellos resulte no accesible, y en los pisos de Nicar. En tota, 321 viviendas que se van a mejorar.

Las afectadas esta semana solicitan licencias de rehabilitación integral y, en dos casos, de reestructuración de una escalera para colocar un ascensor. Los edificios, de los años 60, tienen adosado el cuerpo para las escaleras y será ahí donde se actúe para poner los ascensores.

Se integra en las actuaciones del nuevo plan Conecta Salamanca, que se va a centrar en los barrios de Garrido, Chinchibarra, Estación y Salesas, con más de 33.500 vecinos, una zona elegida por sus características singulares para el desarrollo urbano de una zona de 165 hectáreas, con alta densidad de población, con muchos mayores y diversidad social.

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