El final definitivo de la obra más polémica de Salamanca convertirá 13.000 metros de hormigón en zona natural
La retirada del pavimento del parque de maquinaria elevará la factura de la demolición del lugar por encima de los 400.000 euros y borrará todo rastro de su existencia pese a lo que costó
La demolición del parque de maquinaria, declarado ilegal por los tribunales tras años de disputas, será total y costará otros 170.000 euros que se emplearán en la explanación total de la parcela que ocupó durante más de una década esta instalación. Será la forma de cumplir en su integridad con la sentencia y restaurar la zona a su estado original, sin rastro de los 13.000 m2 de pavimento y de los edificios, que ya fueron retirados.
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El Ayuntamiento de Salamanca ha sacado a concurso las obras para demoler el pavimento del antiguo parque de maquinaria, que es lo único que queda tras desmantelar lo que fue sede del servicio de recogida de basuras. Según la licitación, el coste máximo será de 170.000 euros, cantidad que se suma a los 273.000 euros en los que fue adjudicada la demolición de todas las construcciones que ya se llevó a cabo. En total, más de 440.000 euros habrá costado desmantelar el parque de maquinaria tras un pleito que tiene continuidad: el consistorio reclama más de 7 millones de euros a la CHD por lo ocurrido, ya que se construyó con permisos de este organismo y, pese a ello, fue declarado ilegal por estar en zona inundable.
El pliego indica las labores necesarias que pasan por eliminar todo rastro del parque retirando lo único que queda, que es el pavimento en el que se asentaba. Según los datos del contrato, se trata fundamentalmente de 13.000 m2 de hormigón que constituía la solera de todo el complejo en el que había oficinas, puntos de carga de gas para los camiones y el propio aparcamiento para los vehículos.
El objeto final es la demolición de la plataforma pavimentada de la urbanización del antiguo parque de maquinaria, así como su acondicionamiento natural, consistente en un perfilado de regulación de la superficie eliminada. Es decir, el área que ocupaba en Huerta Otea, en la ribera del río Tormes, será completamente explanada
Además del pavimento, se retirarán algunas instalaciones que quedan, el tramo de vallado cercano al río compuesto por muro de fábrica de ladrillo y se integrará en la renaturalización de esta zona.
Una década de pleitos
El parque de maquinaria dejó de usarse a finales de 2022 y fue demolido en mayo de 2023. El consistorio fue condenado ese año a ejecutar la demolición tras confirmarse en el Tribunal Supremo la ilegalidad de la instalación, proyectada en 2006 y que costó 19 millones de euros. Fue uno de los elementos del contrato firmado aquel año para la recogida de basuras con la empresa FCC. La Confederación Hidrográfica del Duero concdió en 2012 al Ayuntamiento la autorización para levantar la instalación, y ahí empezaron los problemas.
El proyecto contó con la oposición de Ecologistas en Acción, ahora Equo, que denunció que se había levantado en zona inundable. De hecho, la construcción está muy próxima al cauce del río Tormes, frente a la pesquera de Tejares. La obra terminó en 2014, pero poco después estaba en los juzgados.
La instalación, levantada pegada al río, estaba en los juzgados al poco tiempo de ser terminada y ha estado rodeada de mucha polémica hasta su final
El permiso fue posteriormente anulado en junio de 2015 por Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), confirmada por otra del Tribunal Supremo del 23 de noviembre de 2017. Esa fue su sentencia. El alto tribunal declaraba nula la autorización de la CHD para legalizar las obras del parque de maquinaria que la concesionaria del servicio de basuras había construido a la orilla del río Tormes.
En marzo de 2023 agotó su recorrido por los juzgados y se inició el proceso para su demolición, que tenía que ser total. El consistorio pudo recuperar parte de los equipamientos, como las máquinas para suministrar gas comprimido a los camiones.
