Un fuerte despliegue de seguridad en la plaza y primeras intervenciones
Policía Local, Nacional y Guardia Civil han blindado la Plaza Mayor, donde ya ha habido que atender a personas
El regreso de la nochevieja universitaria ha obligado a desplegar un importante dispositivo para afrontar la llegada de miles de jóvenes y su participación en la fiesta de la Plaza Mayor. En las primeras horas, no ha habido que lamentar incidentes aunque sí ha habido que hacer las primeras atenciones.
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A la hora prevista, efectivos de la Policía Local y de la Guardia Civil y Policía Nacional han empezado a ocupar posiciones. Ha habido controles en las entradas a la Plaza Mayor, donde había presencia de personal de seguridad privada sufragado por la organización, aunque siempre acompañados de agentes locales. Los controles han existido para evitar la entrada de alcohol y elementos peligrosos, aunque no han sido exhaustivos.
Antes de comenzar el evento ya había miles de jóvenes en la Plaza Mayor, para la que se calculó un aforo máximo de 20.400 personas. Pocos minutos después, se producía una primera atención con una joven que tenía que ser sacada del recinto. Iba con una acompañante que llevaba un perro que se ha tenido que quedar al cargo de la Cruz Roja.
El despliegue incluye este año un puesto de primeros auxilios como siempre, además de un punto violeta. Según avanzaba la noche, el interior de la plaza se ha ido llenando, aunque no se ha llegado a completar el aforo máximo previsto.
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