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El puente en Cordel de Merinas de Chamberí, reducido a escombros. JM García
El puente sobre la vía que ya es historia en Salamanca y despeja la electrificación

El puente sobre la vía que ya es historia en Salamanca y despeja la electrificación

Adif derriba calle y estructura en Cordel de Merinas, uno de los dos pasos que había que elimiar para el paso de los cables de la tensión eléctrica, en unas obras que tardarán en completarse

Félix Oliva

Salamanca

Domingo, 17 de noviembre 2024, 20:07

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Los derribos de dos puentes dan vía libre al paso de las líneas eléctricas que alimentarán el tren entre Salamanca y Fuentes de Oñoro, pero la reconstrucción del apeadero y otras obras pendientes van a demorar cerca de un año la finalización de un conjunto de obras necesarias para poner a funcionar esta línea ya moderanizada. Mientras tanto, Portugal va a ir abriendo tramos de la línea de la Beira Alta y el día 25 de noviembre el tren volverá a llegar a su lado de la frontera.

Esta semana han caído dos de los pasos sobre las vías del tren que entorpecían la electrificación. Son numerosos en el trayecto de la línea 120 por los barrios de Tejares, Chamberí y Buenos Aires, pero en dos casos era necesario derribarlos.

El primero fue uno que se levantaba fuera de casco urbano, pero dentro del término municipal, más allá de Buenos Aires, que quedó totalmente demolido el lunes. Y el segundo ha sido el paso sobre las vías en la calle Cordel de Merinas de Chamberí, que este domingo ya era historia.

Este último llevaba cortado al tráfico toda la semana y se ha estado preparando el terreno para, este sábado, llevar una excavadora que lo ha reducido a escombros. Ahora toca levantar un nuevo paso que cumpla con la altura necesaria para que pasen los cables de tensión eléctrica que son guiados por los postes de las catenarias.

La electrificación total del tramo Salamanca-Fuentes de Oñoro depende de que se finalicen por completo estas obras. Adif ya confirmó la conexión de todo el trayecto desde la frontera hasta la estación de mercancías de Tejares, pero el paso por el casco urbano de Salamanca se había convertido en un problema. Hasta allí, los numerosos pasos y puentes sí daban la altura y se han podido pasar los cables a la altura necesaria.

Durante años, Adif ha tramitado los proyectos, que tuvieron que ser modificados por varias peticiones municipales, pero que han acumulado un retraso poco justificable de cuatro años, que son los que han pasado desde que se anunció la ejecución de obras al paso por la ciudad hasta que se han empezado a hacer.

A estas obras les quedan, sobre el papel, meses de trabajo porque ahora hay que reconstruir. El contrato, adjudicado hace unas semanas por más de 7 millones de euros con un considerable incremento sobre el presupuesto original, fija 12 meses de plazo.

Apeadero de La Alamedilla

Además de estos pasos superiores, falta reconstruir el apeadero de La Alamedilla, que tambié fue demolido porque no daba la altura necesaria. Desde el día 4 de noviembre los trenes de Valladolid y Madrid ya no tienen parada en este andén, eliminada para no entorpecer las obras de reconstrucción de este lugar, demolido hace más de cuatro años.

Este semana, personal de Adif empezaba a plantear la obra. Sobre el papel, lo que se va a hacer es retirar el acceso provisional construido con material de andamiaje, una pasarela que ha afeado durante años la llegada a la ciudad. A partir de ahí, hay que reconstruir la escalera de acceso original y el propio andén, derruido por completo en agosto de 2020.

Mucho trabajo pendiente

Con todo, faltan todavía más pasos hasta llegar al punto en el que puedan circular los grandes trenes que unirán Salamanca con Aveiro. Una vez estén terminadas estas obras, se podrá poner fin al proyecto de la electrificación de la línea Salamanca-Fuentes de Oñoro, que daría continuidad a la línea que viene de Medina del Campo y llegaría hasta Portugal, donde se unirá a la línea de la Beira Alta.

Adaptadas la alturas de los pasos por la capital, todavía habrá que conectar los servicios de control de la línea, que ya llegan hasta el apartadero de mercancías de Tejares.

Cuando esté todo terminado, podrá enchufarse en la frontera a la línea de la Beira Alta, que Portugal llega reformando varios años y que tiene previsto poner en servicio entre este mes de noviembre y el próximo mes de marzo de 2025.

La línea permitiría el tráfico de grandes trenes de mercancías de hasta 750 metros y Portugal y municipios del oeste salmantino piden usarla también para recuperar conexiones para viajeros.

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