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Aspersor funcionando en Salamanca y embalse de Santa Teresa. SH
Un solo día de lluvia mantiene al límite los embalses de Salamanca y prolonga las restricciones

Un solo día de lluvia mantiene al límite los embalses de Salamanca y prolonga las restricciones

Los 20 litros del domingo, la jornada más lluviosa de todo el año, son insuficientes y el nivel de Santa Teresa baja hasta quedarse en la mitad

Félix Oliva

Salamanca

Lunes, 4 de septiembre 2023, 20:08

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Un solo día de lluvia no arregla nada. Así se puede resumir lo ocurrido con el efímero paso de la DANA por tierras salmantinas, que ha dejado el día de más lluvias de todo el año, pero que se ha revelado insuficiente por completo para aliviar la situación de los embalses. El de referencia para el consumo de agua ha perdido cerca de 30 puntos desde diciembre y profundiza su situación de prealerta, con la mitad de su capacidad sin aprovechar, lo que obligará a mantener las restricciones previstas en Salamanca.

Según los datos en tiempo real de la Confedeación Hidrográfica del Duero, este lunes por la tarde el embalsa de Santa Teresa se encuentra al 50,08% de su capacidad tras haber perdido casi dos puntos completos desde el pasado martes. Eso son casi 8 hectómetros cúbicos menos en una semana y su nivel más bajo desde el 27 de octubre de 2022.

El embalse está a estas alturas peor que en la media de la última década, aunque ligeramente mejor que el año pasado por estas fechas. Durante el invierno estuvo por encima gracias a las precipitaciones, pero desde comienzos de agosto la curva de sus reservas ha empeorado. Ahora mismo acmulada 248 hm3, el 50% de sus casi 500 de capacidad. En junio, su pico más reciente, tenía casi 390 y rozaba el 80%.

Pero, ¿y las lluvias del domingo? El día más lluvioso en un año en la provincia quedó amortizado en pocas horas, al menos, en lo que a reservas hídricas se refiere. El nivel de agua embalsada en Santa Teresa subió muy ligeramente a lo largo del día 3 de septiembre para, después, volver a bajar durante este lunes y quedar estable en los 248,40 hm3. Durante la noche del domingo se virtió agua a ritmo de 20 m3/segundo, pero fueron unas horas.

El embalse de Santa Teresa aupó la crecida del Tormes el pasado diciembre hasta su caudal récord en cuatro años. Entonces, el pantano llegó a acumular casi 400 hm3 de agua, el 80% de su capacidad, y se procedió a abrir compuertas para liberar agua, lo que provocó una crecida controlada del río a su paso por Salamanca.

Del resto de embalses, el gigante de Almendra está al 46% con algo más de 700 hm3 de sus casi 1.200 de capacidad total, aunque preocupa menos porque su uso es fundamentalmente hidroeléctrico. Villagonzalo (96%) y Águeda (77%) están a buen nivel, pero son pequeños, mientras Irueña está al 46% con algo más de 50 hm3.

Siguen las restricciones

Esta situación obliga a mantener las restricciones anunciadas antes del fin de semana. El 1 de septiembre, el Ayuntamiento de Salamanca confirmaba la entrada del municipio en fase de prealerta a causa de la sequía. Esta declaración va ligada al nivel de agua embalsada en el pantano de Santa Teresa, que el pasado viernes se encontraba al 51% de su capacidad.

Además de lanzar una campaña de concienciación, el Consistorio reducirá al máximo el riego por aspersión y el baldeo de calles. Además se anularán las fuentes que no tengan recirculación de agua. En este sentido, desde el consistorio explican que están a lo que marque la CHD y que se sigue lo establecido por el organismo de cuenca: mientras no comunique un cambio en la situación de prealerta, se seguirá igual, en este primer estadio de medidas.

Las grandes crecidas son habituales en el Tormes y el río que atraviesa Salamanca todavía es noticia, casi todos los años, por el aumento de su nivel. Sabemos que en 1626 una gran avenida llegó a dañar el Puente Romano y que en el siglo XIII se documentaron grandes crecidas. Sin embargo, también han sido frecuentes las sequías. En uno de estos períodos sin precipitaciones, en 1752, llegó a secarse el río Tormes en una de las peores sequías de las que hay noticia en España. Sin llegar a ese punto, este parece uno de los cada vez más frecuentes períodos de precipitaciones escasas.

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