La verdad de las multas en las calles peatonales de Salamanca: ni una por la 'falsa' ZBE y muy pocas por circular
Sólo un 10% de todas las denuncias de la Policía Local se refieren a infracciones por no respetar el territorio prioritario de los peatones: 2.500 son por saltarse la señal en calles y 800 por aparcar en la acera
Ni una sola multa por la llamada ZBE y muy pocas por ocupar el territorio peatonal. Esta es la radiografía de las sanciones en calles peatonales que hace la propia Policía Local de Salamanca, que cifra en un 10% del total de denuncias que ponen al año las que son relativas a zonas peatonales.
Salamanca cuenta con una amplia implantación de la dinámica peatonal. Son 290 calles, 44 kilómetros peatonales, un 15% de todas sus vías. Eso convierte a Salamanca en una de las ciudades más peatonalizadas de España, la cuarta en distancia y la quinta en porcentaje, aunque no todo es tan peatonal como se dice.
Con todo, el centro es territorio caminable casi al cien por cien, pero en los barrios su extensión es menor. A ello habría que sumar los kilómetros de aceras, que son también territorio peatonal, y las denominadas calles residenciales, limitadas a 20 y con calzadas donde el peatón tiene la prioridad.
El formato más extendido de calle peatonal, con calzada al mismo nivel que las aceras, pavimento de losas y menos aparcamiento (o ninguno) es el más extendido, aunque se está complementando con otros diseños urbanos que también están ganando fuerza y que otorgan protagonismo y prioridad a los peatones, pero sin eliminar la circulación rodada.
Es el caso de las calles residenciales, calzadas normales con señalización de límite 20 y prioridad incluso para juegos; o las calles de acceso a centros escolares, una obra ya terminada y que entra en acción este comienzo de curso con más zonas donde no se puede aparcar y se aleja a los coches de las puertas de los colegios.
Multas por saltarse la señal
Este es el conjunto de territorios en los que los peatones tienen la prioridad y donde se multa por no respetarla. Pero se multa poco. Según se ha encargado de explicar la propia Policía Local en la última comisión informativa antes de las vacaciones, durante 2024 el cuerpo formuló un total de 38.236 denuncias. De ellas, relativas de una forma u otra a zonas peatonales, son poco más de 3.400.
Según explicaba el jefe del cuerpo, se reparten de la siguiente manera, por infracciones: no obedecer señal de prohibición, 2.452; estacionamiento sobre la acera y otras zonas similares, 960 (de ellas, específicamente sobre la acera, 827); no obedecer señal de circulación prohibida, 122; circular por aceras o zonas peatonales, 107.
Todas ellas se refieren a infracciones al código de circulación y en la lista hay una gran ausencia: las multas por la Zona de Bajas Emisiones. La implantación de la ZBE está todavía en fase previa y, hasta el 1 de octubre, no está previsto empezar a sancionar.
20.000 reincidentes en el control
Sin embargo, el propio ayuntamiento estableció un sistema de multas en sombra. Consisten en enviar una advertencia a los titulares de los vehículos que accedieran al área de la ZBE sin contar con la pertinente autorización; se han concedido más de 22.000 de estas autorizaciones a diversos colectivos, desde vecinos a turistas y carga y descarga, que abarcan casi todas las posibilidades.
Según el consistorio, esta primera advertencia la 'invita' el ayuntamiento, y una vez llegara la comunicación, se procedería a sancionar a partir de la segunda. Sin embargo, tanto la Policía Local como el concejal de Tráfico reconocen que no se ha puesto ni una... a pesar de que hay miles de reincidentes.
Durante las tres primeras semanas de control de la ZBE, 385.625 transitaron por las calles peatonales, con 30.289 vehículos que lo hicieron sin contar con la autorización correspondiente. Cada semana, un 5% de los vehículos incurren en lo que será una infracción multada con 200 euros, con un 7% del total de accesos, pero ese 5% que repiten y que incumplen de forma recurrente.
La ZBE que no lo es
El problema es que la ZBE no actúa por ahora como zona de bajas emisiones, sino como control de acceso a zonas peatonales; el perímetro controlado por cámaras en el que no se permite acceder a calles peatonales, salvo con autorización, corresponde con el futuro de la ZBE, pero todavía no se sanciona como tal.
Es decir, no se está multando por el artículo de la Ley de Tráfico que recoge las sanciones por no respetar una ZBE, obligatoria en decenas de ciudades y que se debe regir por emisiones a partir de 2028. En este caso, lo que las cámaras de control de acceso sancionarán lo harán por infracciones al Reglamento General de la Circulación, al indicar la señal específica de prohibición, que antes no estaba contemplada expresamente.
