Sara Cuadrado-Castaño
Recién llegada desde Nueva York, será la encargada de dar el pregón de este año, un «honor» que ya afronta con nervios, ilusión y un profundo cariño por su ciudad natal
El pregón de las Ferias y Fiestas de Salamanca es siempre uno de los momentos más esperados del mes de septiembre por ser el punto de arranque de unos días en los que la ciudad se llena de vida, tradición y música. Es el instante en el que la Plaza Mayor se convierte en escenario y corazón de la celebración, reuniendo a generaciones enteras en torno a la ilusión compartida. Un acto simbólico que, año tras año, refuerza el orgullo de pertenecer a una ciudad que vive intensamente sus fiestas.
Y esta vez, la voz que resonará desde el balcón del Ayuntamiento será la de una mujer que, tras haber desarrollado gran parte de su carrera científica en el extranjero, regresa a su tierra para compartir un mensaje cargado de orgullo y esperanza. Su presencia en este escenario no solo simboliza el regreso a sus raíces, sino también el reconocimiento a una trayectoria que une a Salamanca con el mundo. De esta manera, será un pregón con acento científico y humano, y en el que tradición y futuro se darán una vez más la mano. Así ha sido su pregón.
Cuadrado lidera Virofend Therapeutics, una empresa instalada en la incubadora municipal de iniciativas que realiza los ensayos clínicos de las investigaciones que desarrolla en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York basadas en una tecnología innovadora consistente en el diseño de virus para tratar el cáncer.
Para Sara Cuadrado, Salamanca es mucho más que una ciudad: es su raíz. «Todo lo importante en mi vida tiene aquí su origen: mi infancia, mis estudios, mi profesión, los momentos compartidos con mi familia y amigos». Pero esa raíz, explica, no solo está en lo personal, sino también en lo académico y en lo cultural porque cada vez que vuelve, experimenta una sensación «de pertenencia y refugio» que le recuerda quién es y de dónde viene. Y es justo esa conexión la que quiere transmitir también en el pregón.
Su vida profesional siempre ha estado marcada por la ciencia, un camino que nació en las aulas y en los laboratorios de la Universidad de Salamanca. Allí descubrió que la investigación podía tener un impacto real en la vida de las personas, y ese hallazgo la llevó a dedicarse a la virología y al estudio del cáncer. «La ciencia no es solo mi profesión, es una forma de conectar con mi entorno y de dejar huella», asegura. Y aunque gran parte de su trayectoria se ha desarrollado en Estados Unidos, nunca dejó de sentir que su corazón y su compromiso estaban ligados a su ciudad natal.
«La ciencia no es solo mi profesión, es una forma de conectar con mi entorno y de dejar huella»
Sara Cuadrado
Investigadora y doctora salmantina
A lo largo de su carrera, y a pesar de todo tipo de creencias extendidas, también ha querido destacar que nunca ha sentido la necesidad de «romper barreras» por ser mujer en un campo tan exigente como la ciencia. Desde el principio, tanto en Salamanca como en Estados Unidos, se ha encontrado con un entorno inclusivo basado en la colaboración y el respeto mutuo que le ha permitido centrarse en la pasión por investigar y avanzar sin condicionantes de género.
«La ciencia se construye a partir de buenos proyectos e ideas innovadoras, no de etiquetas», afirma, convencida de que lo que realmente marca la diferencia es la creatividad, la dedicación y la capacidad de trabajar en equipo. Además, hace especial hincapié en que el verdadero avance científico surge cuando cada persona aporta su talento y esfuerzo sin importar su género, y que la excelencia se mide por los resultados, la pasión y el impacto de las investigaciones en la sociedad.
Por otro lado, volver a su casa, a Salamanca significa para ella mucho más que un cambio de destino. «Representa la oportunidad de devolver a mi tierra lo aprendido, enriquecer la comunidad científica local y compartir el conocimiento adquirido con las personas y el entorno que han formado parte esencial de mi vida», admite Sara. Ver cómo la ciudad invierte en investigación y se abre camino en la biomedicina refuerza su convicción de que aquí se puede transformar la ciencia en soluciones reales que mejoren la vida de las personas.
«Volver representa la oportunidad de devolver a mi tierra lo aprendido»
Sara Cuadrado
Investigadora y doctora salmantina
Un ejemplo de este impulso son proyectos como Virofend Therapeutics o Abioinnova, que lideran desde Salamanca un esfuerzo transformador en el ámbito científico. Ella destaca que el compromiso institucional y académico son fundamentales para que las ideas no se queden solo en los laboratorios, sino que den el salto a su aplicación práctica hasta conseguir «la mejora real de la vida de los pacientes», explica. Sin duda, convencida de que la ciudad tiene la capacidad de convertirse en un referente mundial en conocimiento e innovación.
Además, siendo plenamente consciente del talento joven que late en Salamanca, Sara lanza un mensaje claro a quienes comienzan hoy sus estudios en Biología, Medicina o Bioquímica, y es «que nunca dejen de soñar en grande porque el verdadero avance comienza con la valentía de dar el primer paso y creer en el propio potencial». Asimismo, les recuerda que Salamanca es un lugar privilegiado para formarse, con una tradición intelectual única y donde estarán rodeados de investigadores de altísimo nivel. Y añade que la curiosidad, el esfuerzo y la pasión son las claves para avanzar en un camino tan exigente como apasionante.
«El verdadero avance comienza con la valentía de dar el primer paso y creer en el propio potencial»
Sara Cuadrado
Investigadora y doctora salmantina
El próximo lunes, 8 de septiembre, cuando Sara Cuadrado se asome al balcón del Ayuntamiento, será consciente del peso simbólico que ese instante tiene para la ciudad. Quiere que sus palabras unan a varias generaciones, que suenen como una invitación a la fiesta, pero también como una llamada a construir juntos un futuro lleno de oportunidades. Su intención es que cada salmantino sienta que forma parte de esa historia y que, desde su propia raíz, puede contribuir a un mañana más brillante.
Con humildad y respeto, asegura que intentará transmitir un mensaje que quede grabado en la memoria colectiva. «Que Salamanca siga siendo un referente mundial de conocimiento e innovación». Y espera que esas palabras inspiren tanto a quienes ya forman parte de la ciudad como a las nuevas generaciones, recordando la importancia de mantener viva la curiosidad y la pasión por aprender.