La Covatilla abre temporada con 2.000 valientes pese al frío y el viento

La estación bejarana ha podido iniciar la temporada, algo que ya es un éxito. La Covatilla llevaba desde noviembre recibiendo importantes precipitaciones, pero las altas temperaturas habían impedido que nevara. Y cuando lo hizo, las lluvias acabaron con la poca nieve disponible. Hasta esta semana.

El jueves empezó a nevar y a lo largo del mismo viernes cayeron más de 40 litros en forma de nieve en la estación. Eso, junto a las bajas temperaturas, permitió empezar a producir nieve artificial con los cañones y empezar a trabajar para preparar un inicio de mínimos.

El viernes se confirmó la apertura y el sábado estaban disponibles 500 metros de la pista de debutantes y un remonte, con nieve algo húmeda por una lluvia posterior. Hubo muchos asistentes que tuvieron que lidiar con el mal tiempo, bajas temperaturas (hasta -8,5 de mínima) porque la estación lleva más de 72 horas sin pasar de los 1,6 grados.

Este domingo el día ha sido un poco mejor, con cielos despejados y la nieve en mejor estado, tipo polvo-dura. Lo peor, el fuerte viento, con una racha de 63 km/hora, una de las mayores de Castilla y León.

Ahora, toca cruzar los dedos para que siga nevando y haciendo frío y la estación no tenga que romper su temporada, que se antoja como una de las más complicadas. A La Covatilla le pasa lo mismo que a otras muchas estaciones en el límite de los 2.000 metros de altura, donde cada vez nieva menos y las condiciones son más cálidas.

De hecho, la estación salmantina ha recibido centenares de litros de agua durante los últimos meses (700 entre noviembre y diciembre), pero las temperaturas inusualmente altas para la época y la latitud han impedido que caiga en forma de nieve.