Los 14 municipios de Salamanca que presumen de tener Soletes Repsol en su gastronomía

«Ese lugar que te despierta una sonrisa, que seduce por su cercanía, por su propuesta apetecible y el buen ambiente. Una dirección para sugerir a amigos y guardar como punto de referencia». Así define la Guía Repsol las condiciones que debe cumplir un establecimiento para ser galardonado con este reconocimiento. En Salamanca, hay un total de 40 lugares gastronómicos que han llamado la atención de los expertos, de los cuales 26 están en la capital, y los 14 restantes se encuentran distribuidos por la provincia.

Cada año, esta categoría se va engordando con nuevos locales que tienen ese encanto. Algunas son cafeterías y pastelerías «para desayunar o merendar rico», de hecho, las dos últimas incorporaciones salmantinas - 'Café y Queso' y 'Celi&Co'- entran dentro de este distintivo. Otras se encuadran más en Bares, tascas y barras «donde se va a tomar una cerveza, un vino o un refresco y da gusto tapear». Hay establecimientos más veraniegos que les viene el término de 'solete' como anillo al dedo como son las Terrazas y chiringuitos; y también están los de cuchillo y tenedor que ofrecen «un placer asequible, donde prima la calidad y el buen hacer» bajo el nombre de Restaurantes.

Algo más distendidos son las tres categorías restantes, aunque no por ello menos apetecibles. Heladerías «donde hacen el mejor granizado que hayas probado o helados artesanos que conservan el sabor de siempre» también encuentran su 'solete'. Vinotecas, bodegas y sidrerías donde «picar alguna tapa mientras te rellenan la botella' y los establecimientos de comida rápida »adónde vas cuando quieres cenar tacos, pizza, poke o lo que surja« cierran esta exquisita clasificación.

«No hay muchos restaurantes dentro de un castillo del siglo XV, y menos que preparen tan buenos guisos y usen productos km 0», esta es la reseña que aparece en la ficha del Restaurante Castillo de Montemayor en la Guía Repsol y pocas más explicaciones hay que dar para hacerle merecedor de este reconocimiento. Un establecimiento que mantiene la filosofía de «salvaguardar el patrimonio tradicional gastronómico de la región recurriendo a los productos y sus productores locales», y por ello, recibe este nombramiento.

Alba de Tormes acoge entre sus calles un restaurante especial. «Los hermanos Ojeda, cuarta generación de Casa El Vive, ofrecen una cuidada cocina de mercado complementada por una excelente selección de vinos», explican en la Guía Repsol. Por ello, se encuadra en esa premia de «calidad y buen hacer» que comparten los expertos.

Recibe el nombre de cafetería y, seguramente, en esa clasificación también encontraría su 'solete'. Sin embargo, sobresale porque «da gusto tapear» dentro de la categoría de Bares, tascas y barras. «Tapas cuidadas y buenos guisitos en el corazón del mágico pueblo de Ledesma. Aquí la vocación se ha transmitido de padres a hijos.», afirman desde la Guía Repsol.

Se trata de la única terraza con 'Solete de Verano' de la provincia de Salamanca. El municipio de Garcibuey, dentro de la comarca de Sierra de Francia, acoge este establecimiento que cuenta con, además de calidad culinaria, unas vistas de ensueño. «A los pies del estanque de La Palla y regentado por Quintín, 'El Collao' es el chiringuito con las mejores vistas sobre la Sierra de Francia y una carta informal con producto y vinos del entorno», aseguran desde la Guía Repsol.

La Alberca es uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Salamanca y si además de perderte por sus calles puedes hacer una parada para degustar una buena comida, ya cumple con todo lo deseado. «Desde su terraza puedes disfrutar de la Plaza Mayor del pueblo y tomar un pinchito de los ricos embutidos de la zona o probar los platos típicos de la Sierra de Francia«, añaden desde la Guía Repsol

Izurpi busca destacar por la fusión de tradición y modernidad y ese atrevimiento es lo que le ha llevado a alzarse con el 'solete'. «El restaurante que todo viajero desearía encontrar, escondido en una pequeña aldea y ofreciendo una cocina de temporada moderna y cuidada. Menú degustación a precios imbatibles», explican desde la Guía Repsol. Una gastronomía de raíces tradicionales pero tremendamente elaborada es una de las bases de la filosofía del Izurpi que marcan la diferencia.

Definido como «uno de los mejores asadores de Salamanca: cochinillo, cabrito y lechazo en horno de leña y carnes a la brasa de encina», se hace con este galardón por pertenecer a uno de esos mesones con encanto que seduce por el menú y por un ambiente acogedor.

Aunque no ha recibido esta distinción por la terraza que tiene, bien podría haber sido así. El Restaurante El Molino, además de una comida que merece la pena degustar, está en un enclave precioso. «Disfruta de sus carnes a la brasa mientras escuchas el correr del agua en su bucólica terraza a la orilla del río Francia», explican desde la Guía Repsol. Buena comida en un buen sitio, ¿qué mas se puede pedir?

Una parada obligatoria en una ruta por la provincia de Salamanca es Ciudad Rodrigo, y dentro de ella, por qué no aprovechar para disfrutar también de una buena comida. «Una de las terrazas más bonitas de la zona la tiene 'Zascandil', donde la propuesta va desde carnes a la parrilla hasta buen tapeo», aseguran desde la Guía Repsol. Una buena razón para hacer una parada en uno de los pueblos medievales más bonitos de España.

Béjar es tradición y su comida, aún guarda mucho de esa filosofía. El concreto, el Restaurante La Plata recibe esta distinción de la Guía Repsol por su gastronomía tan conservadora. «Justo a la entrada de Béjar, el pueblo más importante del sureste salmantino, se encuentra este lugar donde comer carne salmantina a la brasa y platos tradicionales de la zona», así justifican el solete que se le ha otorgado a este establecimiento que cuenta ya con más de veinte años de historia.

Otro establecimiento dentro de Béjar es el Hotel Casa Beletri, reconocido por sus menús del día y de fin de semana. «El ambiente en el cual se sumerge el Mesón Restaurante casa Beletri , está basado en el más puro estilo castellano , donde la madera y el buen gusto con la buena comida predomina en todos sus rincones.», explican desde el restaurante. Por su parte, la Guía Repsol fija una reseña como un local donde «los menús de fin de semana impresionan por la calidad y el precio en esta cocina de la capital de la comarca de Sierra de Béjar. Además, buenos pepitos de ternera con pimientos».

Un lugar donde el ir a tomar algo, se convierte en toda una experiencia gastronómica. Un parada obligatoria en Santa Marta de Tormes si lo que quieres es comer unos pinchos de toda la vida con amigos. «Barra bien surtida de todo tipo de pinchos clásicos, siempre impecables», recoge la Guía Repsol en la reseña de la ficha de este bar.

Otra opción para ir de pinchos en Santa Marta de Tormes es el bar Xirex, que goza también de un amplio catálogo de tapas para no quedarte con hambre. En la Guía Repsol lo definen como un «buen sitio para tomarte unos pinchos creativos sin salir del pueblo», y además, adquiere el tono de cafetería porque, tal y como indican, «también hay churros por las mañanas» para acompañar el desayuno.

Un clásico de la carretera antigua de Salamanca a Santa Marta. El Restaurante El Trashoguero destaca por su carne y «el producto salmantino en general». Una parada obligatoria para disfrutar de la gastronomía de la zona y que además, mantiene su lema «huele a leña, sabe a carne» como una filosofía en su cocina.

Una parada obligatoria en la zona si lo que quieres es comer bien. «Sitio agradable en la antigua carretera de Madrid con buenos ibéricos y una carne a la brasa que merece la pena», explican desde la Guía. Especialidad en asados y carnes a la brasa que cuenta además, con menús económicos. Un lugar acogedor donde, además de la gastronomía,a compaña la buena atención que le hace digno del 'solete' de Repsol.

En Mogarraz todo tiene su encanto: las calles, las casas y también los bares. Llama la atención La Autóctona, una antigua casa convertida en taberna con tapas y raciones, para nada tradicionales, que Concha te ayudará a elegir. Así lo explican desde la Guía Repsol donde además añaden que cuentan con una «excelente bodega con vinos singulares de la zona».

Por último pero no menos importante, en Peñaranda de Bracamonte, se encuentra el restaurante Las Cabañas. Goza de siglo y medio de buena cocina y visitas ilustres a menos de 10 minutos de la A-50. «Amplios salones y un menú del día algo superior a la media pero que merece la pena», explican desde la Guía Repsol. Una combinación de tradición centenaria y la innovación, que conquista hasta a los paladares más exquisitos.

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