¿Sabes realmente qué es un delito de odio?

La lucha contra cualquier tipo de intolerancia, y en especial contra el racismo, la xenofobia, la LGTBIfobia y otras formas de intolerancia es una de las grandes preocupaciones, tanto a nivel institucional como social.

El 'odio', según el diccionario de la Real Academia Española, se entiende como 'antipatía y aversión hacia algo o hacia alguien cuyo mal se desea. 'Discriminar', recoge en su segunda acepción, 'dar trato desigual a una persona o colectividad por motivos raciales, religiosos, políticos, de sexo, de edad, de condición física o mental, etc'. Entendemos así, que el odio es una emoción que con la ausencia de empatía suele conllevar un descontrol en la persona, llegando no solo a desear mal, si no provocando un profundo rechazo y llegando a cometer actos violentos y deleznables hacía otra persona -o propiedad- por el simple hecho de pertenecer a un grupo distinto.

No vamos a divagar, ni tampoco juzgaremos. Expondremos los hechos que se recogen en el ámbito legal y penal en España para comprender qué es un delito de odio, cuáles son sus formas, cómo identificarlos, cuándo se cometen y cómo denunciarlos, ya seas víctima o testigo.

La Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) define los «delitos de odio» como: «Un delito de odio se da cuando su autor ha designado intencionadamente a una persona o propiedad como su objetivo por una o más características protegidas o ha expresado hostilidad hacia alguna característica protegida durante la comisión del delito. Se componen de dos elementos: un delito y una motivación prejuiciosa». En el ámbito penal, el concepto de odio se entiende como el basado en la «raza», el color, la religión, la ascendencia o el origen nacional o étnico.

Entre los delitos de odio que principalmente se clasifican -el resto figura como delito de odio y resto de incidentes- son: racismo y xenofobia, orientación sexual e identidad de género, creencias o prácticas religiosas, antisemitismo, discapacidad, aporofobia, ideología, discriminación por sexo o género, discriminación por enfermedad, discriminación generacional y antigitanismo. En los tipos de hecho se recogen las amenazas, promoción pública al odio, injurias, acoso contra la libertad, humillación a la dignidad de personas, amenazas a grupo.

No hay que olvidar que los delitos e incidentes de odio a través de internet son denunciables, siendo así cualquiera que se cometa a través de internet, redes sociales, medios de comunicación social y telefonía y comunicaciones. De este tipo de delitos han aumentado durante 2023 en España un 32% con respecto al año anterior, pasando de 169 casos a 223.

Cuando el autor comete un infracción motivado por el odio o discriminación que siente hacia la víctima. Cualquier persona puede ser víctima de un delito de odio, pertenezca o no al grupo al que va dirigida la acción, esta podría dirigirse contra tu persona o contra tu propiedad.

Es primordial, que si tanto si eres víctima como testigo de un delito de odio acudas a presentar una denuncia.

Desde el Ministerio del Interior y las Fuerzas de Seguridad del Estado, recuerdan en distintas plataformas cómo identificar todo aquello que se constituye como delito de odio.

■ Si una persona se ha mostrado hostil hacia ti por tu raza, orientación e identidad sexual, religión, creencias o discapacidad, ha cometido un delito de odio.

■ No permanezcas indiferente ante los delitos de odio. No tengas miedo. Denúncialos, lo antes posible.

■ No obvies los mensajes u ofensas recibidas en tu perfil de redes sociales, tu correo electrónico o tu teléfono móvil.

■ Cuando denuncies, no omitas las palabras concretas y comentarios dichos por el autor.

■ No olvides contar a la Policía o a la Guardia Civil todo lo que creas que es importante (símbolos, anagramas, tatuajes, vestimentas del autor, testigos de los hechos, etc.). Sea lo que sea, todo es importante.

• Temas
• Guardia Civil
• Ministerio del Interior
• Policía Nacional
• Homofobia
• Racismo