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Los personajes de Kendall y Shiv, en el episodio 3 de la última temporada de 'Succession'. RC
Crítica del episodio 4x03 de 'Succession': la muerte en movimiento

Crítica del episodio 4x03 de 'Succession': la muerte en movimiento

Los pequeños Roy, la alianza terrible, se enfrentan a la peor de las noticias a bordo de un barco donde se celebrará la boda de su hermano Connor

Lunes, 10 de abril 2023

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Este artículo revela acontecimientos importantes de la temporada 4 de 'Succession'.

«El tren del patriarca va a descarrilar esta temporada», escribió Mikel Labastida en el primer 'recap' de esta nueva y última entrega de 'Succession'. Andrea Morán, por su parte, remataba así su comentario al segundo capítulo: «No olvidemos que, en 'Succession', cuando hay una boda de por medio eso significa muerte y drama […] En el próximo episodio se celebrará la boda de Connor y Willa. Abrochémonos los cinturones». ¿Son clarividentes los compañeros de 'Pantallas'? No, son tipos listos que analizan extraordinariamente la ficción, que no es poco. De ser adivinos, ya les habría tocado la lotería. Pero, mira por dónde, la lotería me ha tocado a mí. Metafóricamente, digo. Porque sí: me ha caído EL EPISODIO.

Antes, pongámonos el tocado y en situación, que nos vamos de boda: se casan Connor y Willa. La ceremonia, lejos de ser íntima y discreta, va a tener lugar en un barco con el fin de que resulte más llamativa por aquello de la afición de los Roy a sacar rédito de cualquier cosa que hagan (a Connor le interesa hacer ruido para subir en las encuestas electorales). Y allí se plantan los niños, la alianza rebelde, el trío Calaveras o como quieran llamarlos: Kendall y Roman acuden descorbatados; Shiv, por su parte, viste de un negro profético. Mientras, Connor espera que su padre aparezca para felicitarle por su matrimonio, pero al viejo león, que vuela rumbo a Estocolmo, le siguen interesando más los negocios que sus hijos. De hecho, para asegurarse de que Roman está de su lado, le pide una muestra de lealtad: que le comunique a Gerri su despido. En este caso, no le vale con mandarle una fotopolla.

Antes de zarpar, vemos a Shiv yendo de un lado a otro del barco y rechazando las llamadas de Tom. Finalmente, Tom telefonea a Roman, que está junto a Kendall. Y ahí empieza el baile: «Tu padre está muy enfermo. Muy, muy enfermo». De repente, Kendall y Roman son dos críos estupefactos y, nosotros, unos espectadores sorprendidos: todos nos hemos enterado a la vez. Y, aunque Tom no suena muy esperanzado, aún no nos tememos lo peor, porque la salud del viejo ya nos ha dado varios sustos. Además, estamos solo en el tercer capítulo de la temporada. ¿Cómo va a morir ya Logan Roy?

Cambia el punto de vista

Desde ese momento, y en una inteligentísima decisión, el punto de vista corresponde a los hijos, de tal forma que vivimos la misma incertidumbre al mismo tiempo: ellos, desconcertados, solo saben que Logan se ha quedado inconsciente y que le están practicando la reanimación cardiopulmonar; nosotros tampoco sabemos mucho más, porque las escenas que se desarrollan durante el vuelo no nos proporcionan mayor información: apenas vemos un escorzo del cuerpo de Logan en el suelo, y cómo la auxiliar lo intenta reanimar. La muerte se nos esquiva, no asistimos a un momento de clímax en el que Logan abandona el mundo con un parlamento grandilocuente. Otra buena decisión.

El camarote donde se desarrolla el episodio 3 de la temporada 4 de 'Succession'. RC

Entretanto, la angustia y la tensión se transmiten de forma magistral: el director del episodio, Mark Mylod, afirma que pretende convertirnos en unos 'voyeurs' al no apartar la cámara de los ojos y los gestos de los hermanos, pero va más allá: Mylod nos hace partícipes del catálogo más completo de sentimientos que se pueden experimentar ante una noticia de ese calibre. Algo tan difícil no solo lo consigue a partir de las extraordinarias interpretaciones de los protagonistas, sino también rodando gran parte del episodio como si fuera una sola toma de 27 minutos, con la dificultad añadida de que, al estar realizado en 35 mm y con tres cámaras, los técnicos hubieron de esconder rollos de película por todo el set para, rápidamente, poder ir cargando las cámaras conforme se iba agotando el material.

Seguimos sobrecogidos. «Frank cree que debéis hablarle a vuestro padre», les dice Tom. Kendall y Roy no saben a quién le van a hablar: ¿a un vivo, a un muerto, a un padre, a un jefe, a un enemigo? «Eres muy buen padre», le dice Roman, pero es incapaz de seguir. Le da el teléfono a Kendall: «No puedo perdonarte. Pero no pasa nada. Y te quiero».

Shiv aún no conoce la noticia; Kendall va a buscarla para comunicárselo. Cuando ella llega, aún nadie se atreve a verbalizar que Logan ha muerto. Se lo preguntan constantemente a Tom. «No sabemos, no sabemos», responde. Shiv le habla a su padre. «Papá. Papi», le dice por teléfono. Otra niña asustada. Mientras, todo está en movimiento, porque los ricos, como su dinero, siempre están en continua circulación: el avión sigue en el aire, y el barco zarpa hacia la Isla de Ellis, que es, curiosamente, la puerta de entrada al sueño americano, la llave de la libertad. Vaya.

¿Qué pasa con Connor?

¿Y Connor? Andrea Morán me ilustra con un detalle curioso: en 'Vulture' han minutado que los tres hermanos tardan 15 minutos y 40 segundos en acordarse de Connor y decírselo. Pero Connor, insignificante hasta el final, es otra historia. De hecho, y tras conocer lo sucedido, decide seguir adelante con la boda. Tiene miedo de cancelarla y que Willa termine por abandonarlo.

Cuando un padre rico muere, además de llorarlo (o de bailar sobre su tumba, según el caso), hay que calcular el impacto que su desaparición va a causar en los mercados financieros. También en la vida de quienes le rodeaban. Por ello, todos comienza a tomar posiciones: Tom, Frank y el resto del equipo quieren preparar un comunicado, y dejar a Kerry y a los hijos fuera de él. Ellos se niegan: hasta que se reúna la junta, quieran formar parte del comunicado y tener el control.

Abrazo de los tres hermanos Roy. RC

El barco atraca en el puerto, el avión toma tierra y la alianza rebelde acude a pie de pista. Siobhan abandona el lugar yéndose en el coche con Tom, Roman va a ver a su padre muerto, Kendall contempla la escena a distancia. Y así, a esa distancia, es como vemos la última imagen de Logan. A partir de ahí, nos espera una nueva lucha. Más fratricida aún, si cabe: la que se va a desarrollar entre los vivos. La batalla final.

Logan Roy, al que la tierra le será mucho más leve de lo que él lo fue para sus hijos, es un personaje de una grandísima envergadura y, como tal, lo han reconocido Los Angeles Time y el New York Magazine al publicar su obituario. Es lo mínimo que se merece un tipo que ha pasado a formar parte del imaginario colectivo de toda una generación: parafraseando aquello que dijo Roosevelt sobre Somoza, Logan Roy era un hijo de puta, sí. Pero era nuestro hijo de puta.

Durante la temporada realizaremos un resumen semanal de cada capítulo de 'Succession', en el que se irán turnando Mikel Labastida, Andrea Morán y Rosa Palo.

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