El cambio en el bus urbano de Salamanca que dejará de ser 'a mitad de precio'

Mientras el Gobierno se piensa el final de los abonos gratuitos para viajar en tren y bus, la eliminación de esta medida generada para hacer frente a la subida de los costes de la vida tendrá un efecto arrastre en Salamanca. En concreto, en el bus urbano de la ciudad, para el que se eliminará la bonificación del 50% vigente durante este año y desde 2023 si el Estado decide dar carpetazo a la gratuidad de los transportes, como se está planteando.

Así lo confirman fuentes municipales en el día que el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha recibido al secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible y le ha desplegado la batería de reivindicaciones ferroviarias y para la cartera ministerial en general. El día en el que el titular de Fomento, el ministro Óscar Puente, ha expuesto su opinión favorable a eliminar las bonificaciones implantadas desde septiembre de 2023, lo que afectaría a trenes y buses de Salamanca que dejarían de ser 'gratis' o casi.

Según aseguran desde el ayuntamiento, la bonificación municipal va ligada a la del Gobierno y, en el momento en el que el Estado deje de aportar una cantidad para la rebaja de los transportes públicos, el consistorio retiraría la parte que le corresponde y los precios volverían a ser los de tarifa, todavía, entre los más bajos de España, pero mucho más baratos con el descuento del 50% para los abonos de usuarios habituales. Eso sí, si el Gobierno decide mantener un año más las bonificaciones, el ayuntamiento se compromete a mantener su aportación.

La retirada de los populares abonos para viajar gratis o con un fuerte descuento en tren y bus es algo que el Gobierno se piensa desde hace tiempo porque, ahora mismo, se pagan a cargo de los presupuestos del Estado. Se idearon tras la invasión de Ucrania y el pico de inflación aparejado por los costes de los transportes, con los carburantes por encima de los 2 euros/litro, una situación que ya no es la misma.

El IPC se ha relajado y los carburantes ronda el euro/litro en la provincia en el caso del gasóleo, tras muchos meses de bajada progresiva y casi continuada. Reparado el daño a los bolsillos durante los peores años de la crisis de precios, el Gobierno podría eliminar las bonificaciones al transportes.

Eso arrastraría también a otras medidas que acompañaban a la que ha sido la más popular, los abonos gratuitos para viajar en tren. En el mismo paquete estaban la rebaja permanente de los buses interurbanos, al 50%, y su extensión a los transportes urbanos. Como muchos ayuntamientos, el de Salamanca se sumó a la propuesta del Gobierno para rebajar los precios a finales de 2023 y después se hizo extensivo a 2024.

El Estado planteó rebajar a la mitad los abonos del transporte urbano y ofrecía hacerse cargo de un 30% de la rebaja, si los ayuntamientos asumían el otro 20%. Para ello, se destinaron 660 millones para cubrir el coste de la reducción entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2024.

Al presentar los presupuestos municipales de 2024, el consistorio se comprometió a adoptar la rebaja al 50% del bus urbano de la capital si el Gobierno prorrogaba las medidas, como hizo a finales de 2023. Pero si ahora el Estado abandona la bonificación, el ayuntamiento haría lo propio y pondría fin a 16 meses de buses al 50%.

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