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Precios en una gasolinera finales del pasado mes de octubre. salamancahoy
Los carburantes, ante el fin del descuento: el diésel tan caro como en marzo y la gasolina baja

Los carburantes, ante el fin del descuento: el diésel tan caro como en marzo y la gasolina baja

La bonificación de 20 céntimos acabará el próximo 1 de enero para la mayoría de la población, dejando un nuevo panorama en el coste del combustible

Nacho Martín

Salamanca

Martes, 20 de diciembre 2022, 08:32

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El próximo 1 de enero será el inicio de algo nuevo para gran parte de la población. El cambio de año muchas personas lo perciben como el momento adecuado de hacer modificaciones a sus vidas y abrir un nuevo capítulo con la esperanza que mejore la situación que se estaba viviendo hasta entonces. Al igual que en los casos personales, el inicio de una nueva añada sirve para establecer nuevas normas o cambiar las existentes aprovechando una fecha tan representativa. Esto último es la coyuntura de la que se ha valido el Gobierno de España para retirar la bonificación de 20 céntimos que existe en los carburantes.

Al comienzo del pasado mes de abril, el Ejecutivo central ponía en marcha una medida con la que hacer frente a la subida desorbitada de los precios de los combustibles provocada por la invasión rusa a Ucrania. La iniciativa consistía en aplicar un descuento de 20 céntimos al coste del diésel y la gasolina para aliviar el bolsillo de los consumidores. Lo que se estableció hasta el 30 de junio se prolongó hasta el próximo 31 de diciembre, día en el que la mayoría de los habitantes del país dejarán de disfrutar de esta ayuda. Desde el Gobierno de la nación se alude a que el costo en los carburantes se ha moderado, pero, ¿cómo ha evolucionado este precio en Salamanca desde el inicio del descuento?

1,802 y 1,782 €/litroEste era el precio de la gasolina Sin Plomo 95 y el Gasóleo A habitual, respectivamente, en los días previos al inicio del descuento.

Las gasolineras en la provincia charra en los últimos coletazos de marzo previos a la llegada de la bonificación marcaban, de media, 1,932 €/litro en la gasolina Sin Plomo 98, 1,802 €/litro en la gasolina Sin Plomo 95, 1,875 €/litro en Gasóleo A plus y 1,782 €/litro en Gasóleo A; atendiendo a la media de España, la gasolina estaba en 1,792 €/litro y el diésel 1,768 €/litro. Un precio elevado si lo comparamos con inicios 2022 en los que la gasolina no pasaba de los 1,51 €/litro de media y 1,388 €/litro el diésel.

A partir de esta fecha, ya con el descuento, la escalada en el valor siguió su curso, alcanzando su pico en junio de 2022, con 2.292 €/litro de media en Salamanca en gasolina Sin Plomo 98, 2.142 €/litro en gasolina Sin Plomo 95 y Gasóleo A plus y 2.052 en Gasóleo A. Respecto a España, 2.114 €/litro era el precio de media de la gasolina y 2.036 €/litro en el diésel. Tras esto, comenzó un descenso que se paró en agosto.

Al término de ese mes, los salmantinos veían en los marcadores de las gasolineras un costo de media de 1,869 €/litro en Gasóleo A y 1,823 €/litro en gasolina Sin Plomo 95, siendo la segunda ocasión el año (tras el mes de abril) en la que la gasolina era más barata que diésel, algo que se mantiene hasta estos momentos.

En este contexto, el siguiente mes tuvo una situación opuesta en los dos combustibles. La gasolina siguió su descenso, mientras que el diésel tuvo un nuevo repunte. La media nacional se situó en 1,865 €/litro en el diésel y 1,716 €/litro en la gasolina. Octubre fue un punto de inflexión y una nueva caída en el coste, pequeña atendiendo a los valores de finales de noviembre y de gran dimensión con los números actuales.

Las gasolineras 'low cost', de moda

El impacto que el contexto económico actual está teniendo en el bolsillo de los consumidores ha incrementado el número de conductores españoles que repostan en gasolineras automáticas. Así lo pone de manifiesto el estudio «Hábitos de consumo de combustible en España», elaborado por Plenoil, en el que observa que 6 de cada 10 conductores en España (61,04%) suelen repostar en estaciones de servicio de «bajo coste» frente a un 33,37% que reconoce ser cliente habitual de las gasolineras tradicionales. Asimismo, del segmento de conductores que recurren a las gasolineras automáticas, la mitad (30,30%) ha comenzado a hacerlo recientemente con el fin de asumir el menor precio posible.

El territorio charro cerró noviembre con 1,987 €/litro de media en el diésel y 1,867 €/litro en la gasolina. En el global nacional, estas medias eran de 1,759 €/litro en la gasolina y de 1,893 €/litro en el diésel. Estas cifras varían en gran cantidad si las comparamos con las presentes en el día de hoy, 20 de diciembre. El Gasóleo A alcanza los 1,836 €/litro, la gasolina Sin Plomo 98 los 1,806 €/litro, el Gasóleo A los 1,734 €/litro y la gasolina Sin Plomo 95 los 1,64 €/litro. Hay que recordar que estas cantidades son diferentes entre las llamadas gasolineras 'low cost', cuyo precio en los carburantes es menor (situándose el diésel en estos días alrededor de 1,55 €/litro y la gasolina Sin Plomo 95 en 1,51 €/litro) y las 'premium', que tienen un coste mayor (alrededor de 1,70 €/litro para el diésel y 1,58 €/litro para la gasolina Sin Plomo 95).

1,64 y 1,734 €/litroEste es el precio de la gasolina Sin Plomo 95 y el Gasóleo A habitual, respectivamente, en los últimos días en los que se acerca el fin del descuento.

En general, el precio de los carburantes se incrementó con la llegada de la bonificación de 20 céntimos, llegando a superar los 2€ en ambos combustibles. Con el paso del año y la proximidad del fin del descuento y una situación más estable (dentro de la gravedad) de la guerra entre Rusia y Ucrania, el costo ha disminuido en buena medida, alejándose de ese pico de principios de verano. Desde el inicio de la iniciativa, la gasolina en su precio medio ha caído en Salamanca aproximadamente 20 céntimos y el diésel se ha mantenido en sus mismos valores medios.

La bonificación acabará también en los hogares

De forma común, asociamos solo el descuento en carburantes al repostaje de vehículos, sin embargo, también se aplica para el gasóleo de las casas. Los usuarios que usen esta energía en sus hogares han de saber que la bonificación desaparece también en este caso.

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