La piscina cubierta más popular de Salamanca vuelve a tener agua
Se está haciendo una puesta a punto y prueba de todas las instalaciones aunque todavía no hay fecha para volver a recibir a los usuarios
La piscina de La Alamedilla, la primera climatizada de la ciudad, vuelve a tener agua y empieza la cuenta atrás para su reapertura, para la que no hay una fecha oficial, pero que apunta a marzo. En estos momentos, se está llevando a cabo la puesta a punto y prueba de todas las instalaciones, lo que incluye haber llenado de agua los vasos para comprobar que todo está en orden.
Esto es lo que se está haciendo en estos momentos en una instalación que se puede considerar terminada. La obra está hecha, se han retirado las vallas y, asomándose al interior, se ve ya parte del mobiliario como el mostrador de acceso. Y lo más importante, vuelve a haber agua en la piscina casi 20 meses después.
El ya lejano 1 de julio de 2023 la piscina cerraba sus puertas. Era sábado y el viernes por la noche había despedido a su último bañista. Se iniciaba entonces un largo período de cierre, el primero en más de 33 años, necesario para devolver a su mejor estado la piscina climatizada más veterana de Salamanca.
Aquel día se iniciaba la cuenta atrás para unas obras que se han complicado más de lo esperado. La inversión, de cerca de 3 millones de euros, fijaba un plazo de ejecución que terminaba en septiembre de 2024, coincidiendo con la fecha de justificación de los fondos europeos con los que se financiaba el proyecto, ampliado y duplicado del inicial del ayuntamiento.
Sin embargo, llegó la fecha y la obra estaba sin terminar. Llegada la fecha inicialmente prevista, el 3 de junio, nada se sabía hasta que en agosto de 2024 el ayuntamiento anunciaba la prórroga hasta diciembre de las obras. El motivo se supo después, complicaciones surgidas en las partes estructurales de las instalaciones lo que implicaron un sobrecoste de 397.000 euros de los nuevos trabajos previstos. En concreto, se realizarían diferentes actuaciones para la resolución de las patologías de la estructura de hormigón y la sustitución de la estructura metálica de la cubierta sur.
La nueva fecha prevista era finales de 2024 para poder bañarse en enero, pero llegó el plazo y tampoco se cumplió. El consistorio aseguró que la obra estaba finalizada en tiempo, pero a día de hoy todavía no ha sido posible el uso por parte de nadadores.
Sin embargo, la piscina luce terminada. Tiene, salvo algún detalle, toda su nueva envolvente exterior que le da un aspecto moderno. Tras los trabajos de remodelación, los operarios terminarán de ponerla a punto con las funciones de limpieza y mobiliario. Además, se están probando todas las instalaciones y la estanqueidad del nuevo vaso.
