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Instalaciones de carga de cereal en la terminal de la estación de La Fuente de San Esteban. SH

La línea Salamanca-Portugal estrena en un pueblo un puerto seco capaz de mover trenes de 750 metros llenos de cereal

Una empresa privada levanta una terminal intermodal con piqueras para grano en la antigua estación de La Fuente de San Esteban y está lista para acoger grandes trenes y aprovechar la línea cuando se electrifique

Félix Oliva

Salamanca

Domingo, 9 de noviembre 2025, 10:42

Una empresa familiar se ha adelantado a todos y ha dado el pistoletazo de salida a la explotación de la línea Salamanca-Fuentes de Oñoro con la instalación del primer puerto seco y terminal intermodal de mercancías en funcionamiento de toda la provincia. Tiene capacidad para trenes de 750 metros, está electrificada y cuenta con instalaciones para el trasiego y almacenaje de grano y cereales, algo que iba a ser diferencial en el puerto seco de la capital, al que le sale competencia con esta iniciativa.

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El enclave ocupa un lugar destacado en la antigua estación de La Fuente de San Esteban y se anticipa a la terminal ferroviaria que se está ultimando en la capital y que pretende explotar el tránsito de trenes de mercancías en la misma línea, para la que también se reclama que vuelvan los trenes de pasajeros que desaparecieron hace 40 años. La terminal está a medio camino entre Salamanca y Portugal en una línea que ha sido reactivada en lado portugués, con nuevos trenes entre Lisboa y la frontera.

La instalación es titularidad de Transcereales Cruz, una empresa logística que se dedica al transporte de grano. Utiliza la derivación particular de la estación, un apartadero en la estación preparado para la actividad industrial. Desde 1998 opera en la estación de La Fuente de San Esteban y se dedican al comercio de cereales, oleaginosas y otros productos.

Allí la empresa ha desarrollado un proyecto logístico de envergadura: un Puerto Seco Intermodal destinado a conectar Salamanca y su entorno al Corredor Atlántico, consolidando a La Fuente de San Esteban como un punto clave del transporte ferroviario de mercancías. Se trata de una terminal de carga que tiene cerca la autovía y permite la intermodalidad carretera/tren.

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Las instalaciones, ya en funcionamiento, permiten la carga y descarga de trenes de hasta 750 metros, con piqueras de 1.000 toneladas/día, capacidad de alamacenaje, básculas ferroviarias homologadas de 160 toneladas, y una conexión directa a la Red Ferroviaria de Interés General (RFIG), la línea que gestiona Adif y a la que también está enganchado el puerto seco de la capital.

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Eso le permitirá mover grandes cantidades de cereales y otros productos en grano entre Portugal y España, algo que iba a ser exclusivo del puerto seco de la capital, que está instalando este mismo equipamiento.

La empresa cuenta con las habilitaciones necesarias para operar de forma autónoma sin depender de terceros en las maniobras de carga y expedición, en las que a veces hay que contar con empresas ferroviarias. A medio plazo, espera la llegada de trenes eléctricos una vez finalice la electrificación en curso de la línea Salamanca–Fuentes de Oñoro, lo que reforzará aún más la competitividad del proyecto, aseguran desde la empresa.

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Además, dispone de más de 140.000 m² de terminal con espacio anexo preparado para ampliar líneas o desarrollar nuevas actividades logísticas.

Una línea en uso y actualizada

La antigua línea es una bifurcación y arranca en la estación de La Fuente de San Esteban. Hace unos meses salió a la luz el derribo de parte de sus históricas instalaciones que, según denunció el ayuntamiento del municipiol, Adif hizo sin pedir autorización. Supuso la pérdida de un antiguo galpón de madera originario de cuando se construyó la estación, a finales del siglo XIX, pero también sacó a la luz las posibilidades de esta línea.

La Fuente de San Esteban forma parte de la línea 120, la Salamanca-Fuentes de Oñoro, que ahora se está electrificando. De hecho, lo está prácticamente en su totalidad hasta la frontera con la excepción de Salamanca. Adif tiene previsto ponerla en marcha, conectarla y hacer las pruebas necesarias cuando acabe de reconstruir el viaductor sobre la antigua carretera de Béjar en el barrio de San José, pero no hay fechas cerradas.

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Pasa por Martín de Yeltes, Sancti-Spíritus, Ciudad Rodrigo, Espeja y Fuentes de Oñoro para desembocar en la frontera, donde sigue camino ahora en una línea portuguesa que se ha reabierto hace unas semanas, totalmente actualizada, con tráfico de mercancías y también de pasajeros.

En La Fuente, la línea está todavía en uso, la señalización y sistemas de seguridad de circulación son modernos; todavía pasan trenes y hacen maniobras en esta estación. Además, ha sido electrificada en el proyecto para unir Salamanca y la frontera, lo que aumenta sus posibilidades.

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La electrificación abre opciones no sólo para el transporte de mercancías, sino para el de viajeros. Se une en la frontera a la recién abierta línea portuguesa de la Beira Alta, que permite trenes desde Lisboa por esta línea regional. Además, en un futuro Portugal quiere hacer una línea de alta velocidad nueva desde Aveiro a la frontera que engancharía también con la línea de Fuentes de Oñoro.

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