La multa en Salamanca por tirar el césped recién cortado de una parcela junto al cementerio
Un aviso permite a la Policía Local buscar y localizar a una persona que iba a arrojar hierba de la siega de un terreno
Las sanciones por ensuciar la calle protagonizan cada semana el trabajo de la Policía Local y el área administrativa del ayuntamiento que tramita los correspondientes expedientes por tirar basura y los muy frecuentes por escupir o miccionar en la vía pública. Y luego están los casos especiales como el que ha tenido trámite en la comisión de Medio Ambiente, con una importante multa a una persona por arrojar los restos de la siega de una parcela.
La citada comisión es la competente para hacer cumplir las ordenanzas de convivencia y limpieza urbana, que son las que contienen las normas que prohiben ensuciar la vía pública. Esta semana, la comisión ha dado el visto bueno a una larga lista de once sanciones por hacer las necesidades, que se sancionan con 500 euros de multa tras el último cambio en la ordenanza; se ha decidido endurecerla para frenar esta fea costumbre, que es la principal infracción.
Según los datos de la Policía Local, el año pasado se pusieron 855 multas por hacer las necesidades en la calle: eso supone unas 60 de media al mes. Se trata de una conducta incívica, la más sancionada cada año en virtud de dos ordenanzas.
Al margen de las micciones, la mayoría nocturnas y cerca de zonas de bares de copas, aparecen de vez en cuando otros casos más llamativos como muebles que se tiran por la ventana como el de esta semana, cuando la Policía Local ha llegado a perseguir a una persona de la que se sospechaba iba a arrojar residuos en una zona de escombrera ilegal.
El asunto se remonta al pasado mes de agosto cuando una llamada alerta a la Policía Local de una posible infracción contra la ordenanza de limpieza urbana. El alertante informa de la presencia de una furgoneta con un remolque que ha entrado por un camino hacia la zona del cementerio San Carlos. Los agentes creen que puede ir a tirar escombros que lleva en el remolque.
Los agentes acuden inmediatamente y recorren el lugar en busca de un vehículo que responda a la descripción ofrecida. Finalmente, localizan la furgoneta con remolque y localizan a una persona que está arrojando residuos, pero no son los esperados.
Al llegar, ven a una persona que, a plena luz del día, está tirando restos de hierba cortada. Cuando los agentes le descubren, asegura que es césped de una propiedad de un amigo, que acababa de cortar y que no sabía donde arrojar, por lo que decidió traerlo a este punto de la ciudad.
Los agentes le informan de que lo que está haciendo es una infracción a la ordenanza de limpieza urbana, que prohibe arrojar residuos de todo tipo en la vía pública. Le comunican que harán el correspondiente informe que acaba en un expediente y propuesta de multa. Además, comprueban que el vehículo que conduce tiene la ITV caducada.
Antes de marcharse, el denunciado recoge la hierba que había depositado, pero el expediente ha llegado esta semana a la mesa del ayuntamiento y acabarán en una multa de hasta 750 euros, que es la habitual para una infracción leve por tirar residuos de cualquier tipo.
