Corchado reitera su inocencia en un extenso informe: «Ninguna de mis actuaciones puede considerarse delictiva»

El rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado, ha ofrecido a los medios este lunes 30 de septiembre una respuesta oficial en forma de documento para defenderse de las acusaciones del Comité Español de Ética en las que se le acusa infrigir el código de buenas prácticas científicas. El Ministerio de Ciencia solicitó el 3 de mayo al citado comité un informe sobre la actividad investigadora de Corchado, elegido el 7 de mayo como nuevo rector de la Usal, entre otros asuntos, ante el elevado nivel de autocitas científicas.

Se trata de un documento de 55 páginas titulado 'En respuesta para garantizar mis derechos' que consta de cuatro partes: 'Esclareciendo la verdad: mi defensa ante la distorsión informativa'; 'Acerca de las actuaciones llevadas a cabo por el Comité Español de Ética de la Investigación', 'Acerca del informe bibliométrico sobre mi producción científica realizado a petición del CEEI, por dos investigadores de la Universidad de Granada' y, por último, 'conclusiones'.

El pasado jueves 26 el rector ya convocó de urgencia una rueda de prensa para defenderse públicamente y este lunes la respuesta ha llegado en forma comunicado. En el apartado de conclusiones, corchado mantiene que está siendo «objeto de una campaña de difamación sistémica, impulsada por intereses personales y no por una verdadera preocupación por la ética científica. La información ha sido manipulada para generar presión y tratar de forzar mi dimisión como rector de la Universidad de Salamanca». Además añade que «la campaña de desprestigio ha llegado incluso a medios internacionales con el fin de dañar mi imagen globalmente». Reitera que ha sido «víctima de suplantación de identidad en redes académica y publicaciones», hecho que ha sido «denunciado ante la Policía Nacional». Recoge que se han eliminado 25 artículos que «fraudulentamente incluían mi nombre».

El rector explica que «ante las acusaciones de malas prácticas, mi equipo y yo revisamos nuestras publicaciones y reportamos errores de edición a la editorial Springer, mostrando así nuestra disposición a corregir cualquier fallo».

Al respecto de la actuación del Comité de Ética, Corchado incide en que «la petición de un informe propio a los investigadores de la Universidad de Granda me generan una situación de indefensión al no haber tenido posibilidad de contradicción por mi parte». Además, «teniendo el informe en su poder, deciden solicitar otro a la Universidad de Salamanca y una vez que el mismo no responde a sus convicciones, permiten hacer público el primero de ellos». Corchado acusa al presidente del Comité, Jordi Camí de «parcialidad» por sus comentarios públicos y juicios anticipados sobre mi integridad profesional«.

De cara al informa de los investigadores de la Universidad de Granada, el rector de la Usal concluye que «presenta graves deficiencias que lo invalidan como instrumento de evaluación imparcial», ya que «presenta numerosas imprecisiones y sesgos». Por ello, cree Corchado que «las acusaciones del informe acerca de la realización de malas prácticas científicas no tienen fundamento sólido ya que se basan en metodología poco objetiva». Y además, considera el rector que no se respeta el derecho de contradicción por no «darme la oportunidad» de defensa.

Además, acusa Corchado a los autores del informe «de estar en contacto con periodistas desde mucho antes de la publicación del documento». Añade al respecto de las autocitas que «se me critica el uso de autocitas pero varios de los autores del informe tienen también un elevado número de ellas en sus publicaciones». «Los propios autores del informe presentan un comportamiento similar en sus publicaciones, llegando a porcentajes elevados de autocitas incluso del 100%»

Para el rector, uno de los errores fundamentales del informe es la «constante confusión entre diferentes tipos de documentos académicos y artículos científicos».

«Las metodologías bibliométricas utilizadas por el informe de la Universidad de Granada difieren significativamente de las empleadas por instituciones reconocidas como la ANECA, lo que invalida las acusaciones de 'malas prácticas' contra mí», significa Corchado.

Por último, en su extenso informe, Corchado concluye que «ninguna de la actuaciones que se me atribuyen puede considerarse delictiva y que estos intentos de desprestigio no afectarán mi labor como rector de la Usal».

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