Secciones
Servicios
Destacamos
Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.
Opciones para compartir
El arreglo del telesilla que lleva a las pistas más altas de La Covatilla va a generar una importante factura el Ayuntamiento de Béjar, que pretende ceder la gestión de la estación de esquí a una empresa privada, pero que tiene que poner a punto la instalación para poder abrir. La revisión del remonte es una de las condiciones que puso la Junta hace un año para conceder el permiso y que se cifró en hasta 250.000 euros; entonces, se decidió hacerlo en fases y la segunda toca este año: rondará los 110.000 euros.
Noticia relacionada
A varios meses vista de la temporada de esquí, la estación de La Covatilla se debate de nuevo entre su viabilidad y el elevado coste de mantener abierta la instalación. Mientras se resuelve su posible concesión a una empresa privada o una colaboración, las arcas municipales tienen que asumir un importante coste que es fundamental para volver a abrir.
El Ayuntamiento de Béjar acaba de licitar por 114.950 euros el contrato para la revisión extraordinaria del Telesilla del Centro Turístico Sierra de Béjar La Covatilla. Se trata de la segunda fase de un proceso de puesta a punto que se inició la temporada pasada y que tensó las arcas públicas del ayuntamiento.
El contrato se licitó a finales de julio, pero todavía no se ha adjudicado; los trabajos durarán cuatro meses, con lo que deberían estar en marcha antes de septiembre si se quiere abrir antes de que acabe el año. Si el objetivo es inaugurar temporada el puente de diciembre, ya va tarde: la última campaña, no obstante, arrancó en enero.
Hace un año, la Junta de Castilla y León, a través de la Dirección General de Transporte por Cable, solicitaba una revisión técnica del telesilla como condición obligatoria para conceder el permiso de apertura. Este equipo es vital para la estación ya que permite llegar a las pistas superiores, las más largas e interesantes para los aficionados. Sin remonte, la estación se quedaría con las pistas de debutantes y perdería buena parte de su ya delicado atractivo.
Según la estimación que hizo en su día el equipo de Gobierno bejarano, esta revisión podría suponer un coste considerable de más de 250.000 euros. El alcalde de Béjar, Luis Francisco Martín, comprometió la apertura del telesilla sin un gran quebranto económico y se buscaron alternativas menos costosas. «A lo mejor hay que hacer una revisión menos severa pero más ligera con una inspección de clave o de silla», dijo.
La solución fue una revisión más básica, de unos 40.000 euros, una primera fase con el compromiso de completar el resto de la revisión técnica de cara a la temporada 2024/2025. Y esto es lo que se va a hacer ahora para intentar salvar el funcionamiento de la estación, que atraviesa por un momento complicado, acosada por la escasez de nieve y tras una temporada reducida al extremo: 17 días de apertura total.
Todo, mientras se busca una empresa que la gestione y libre al ayuntamiento de cargar con su coste total. El objetivo es desprenderse de la estación y devolverla a la gestión privada, como lo estuvo en anteriores etapas. De este modo, la empresa que se haga cargo de la estación hará las contrataciones de personal y se ocupará de la explotación del recinto para la práctica del esquí y el turismo, además de para los 'bautismos blancos' que contratan ayuntamientos y Diputación y que este año se tuvieron que suspender.
El Ayuntamiento de Béjar es actualmente propietario y gestor de la estación que asumió en 2014 y diez años después volverá a externalizar la gestión, pero lo hará una vez ponga en marcha las inversiones previstas que cuentan con fondos del plan para la reconversión industrial, casi cinco millones de euros entre Junta y Diputación.
El proyecto contempla mejorar el sistema de fabricación de nieve artificial, mejorar las instalaciones, vehículos y pistas y un proyecto para conseguir que su uso no esté 100% ligado al esquí y desestacionalizarlo, es decir, conseguir afluencia fuera de la temporada invernal para otros usos. Esto es algo que se dejó de lado tras las últimas elecciones al descartarse el proyecto para crear un centro de entrenamiento en altura, idea que abanderaba el anterior alcalde del PSOE y que el nuevo, del PP, no compartía.
La decisión llega tras la peor temporada de los últimos años. Se terminó el pasado 15 de abril oficialmente, aunque la realidad es que desde el día 5 de este mes no se había podido esquiar en las instalaciones, azotadas siempre por una climatología muy adversas. El fuerte viento, con las mayores rachas de España, ha sido su mayor enemigo este año, pero también le ha afectado la nieve, que debería ser su mayor tesoro, pero que ha cortado carreteras de acceso y llegó a sepultar la estación en marzo.
El balance final de la temporada, que empezó ya muy tarde, fue desastroso. Tras los problemas para colocar el telesquí y las averías del telesilla, no superó los 17 días de funcionamiento. La cafetería y las zonas de debutantes han estado operativas más tiempo, pero las pistas para la práctica del esquí se han limitado a esas menos de tres semanas en períodos intermitentes: cinco días en febrero, diez en marzo y dos en abril.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
¿Qué pensión pueden cobrar las amas de casa y cuánto dinero?
Las Provincias
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.